C. Vidal
El Eivissa Bàsquet Sa Graduada está muy cerca de cerrar la plantilla para la temporada 2006/2007. El conjunto que dirige José Luis Oliete cuenta por el momento con ocho efectivos y su objetivo es tener diez fichas, por lo que sólo falta contratar un base y un pívot. El primer puesto parece casi seguro para Tomeu Miralles, base mallorquín de 29 años que procede del Porreres y que ayer estuvo a prueba en Es Pratet para intentar convencer a Oliete. «Es un jugador que lleva muchos años en la Primera Nacional y que tiene mucha experiencia. En la directiva consideramos que es el base que estamos buscando, porque le conocemos de hace tiempo, pero ahora falta que el técnico le vea en acción y decida si se le ficha o no», afirma José Antonio Ribas, 'Cote', presidente de Sa Graduada.
Cote tiene claro que se está haciendo un equipo de garantías en el que es el regreso del equipo a la Primera División. «Tenemos una plantilla para ascender a Liga EBA, aunque aún nos faltan esos dos puestos por cubrir», declara. Por el momento, Javier Vázquez es el único base del equipo, al que podría sumarse en breve Miralles. Como aleros, Oliete cuenta con David Díaz, David Lopéz, Jorge Rosa y Àngel Pascual que, pese a que todo apuntaba que pensaba retirarse sigue un año más en activo. Como pívots, y tras la marcha de Nacho Moreno, que posiblemente fichará por el Ibizatours, siguen Urith Kelly, Enrique Sevillano y José Antonio Campos, que sube del equipo de Primera autonómica. El equipo, por lo tanto, estaría cerrado con el fichaje de un hombre de juego interior.