C. de Torres |BOURG EN BRESSE
El belga Tom Boonen, del Quick Step, terminó con una sequía de dos años en el Tour de Francia al apuntarse por delante del español Óscar Freire la sexta etapa disputada entre Semur en Auxois y Bourg en Bresse, en la que el suizo Fabian Cancellara confirmó que se presentará de amarillo a los Alpes y los favoritos pasaron un día tranquilo.
Boonen, el gigante belga que se quedó con la miel en los labios en Gante ante su compañero y amigo Gert Steegmans, recuperó su mejor nivel, y por lo tanto una sonrisa que le faltaba en el Tour, donde ya suma cinco victorias, la última en 2005, en la ciudad de Tours, año mágico, pues en Madrid se proclamó campeón mundial.
Un alivio para Boonen, de 26 años, que superó «en un apretado y peligroso esprint» a Freire, otra vez segundo y de nuevo entre los más grandes, pero sin rematar. La tercera plaza fue para el alemán Erik Zabel, con el mismo tiempo que el vencedor, es decir, 5h.20.59, a una media de 37,29 por hora, lo que indica que la prisa no fue el denominador común de la etapa.
El doble vencedor de la Vuelta a Flandes (2005 y 2006) y de la París-Roubaix (2005), ganó sin poder efectuar el cambio en su bicicleta por un roce de un rival en la rueda a falta de 1,5 kms de meta.
Se sobrepuso al percance para apuntarse el éxito número 66 desde su debut profesional en 2002. En la general no hubo cambios y Cancellara (CSC) firmó la primera semana de amarillo. Hoy, en los Alpes, se despedirá de la prenda, pero que le quiten lo bailado. Segundo se mantuvo, con fisura de coxis incluida, el alemán Andreas Kloden (Astana), a 33 segundos y tercero el italiano Filippo Pozzato (Liquigas) a 35.
Por otro lado, Óscar Freire no tomará hoy la salida como consecuencia de las molestias que viene arrastrando por culpa de un furúnculo.