El Eivissa y la Peña Deportiva inician la cuenta atrás en el campeonato de liga de Segunda División B. Sólo faltan diez jornadas para que concluya la competición y los dos equipos ibicencos apuran sus opciones para salvar la categoría, un objetivo que cada jornada que pasa parece más complicado sobre todo en el caso de los rojillos. La derrota este domingo en Can Misses ante Osasuna Promesas por 5-6 ha caído como una losa en el entorno de la SE Eivissa, en un partido que se presentaba como una auténtica final y que deja al equipo de Alfredo Santaelena a 7 puntos de la permanencia. La Peña, por su parte, viene de perder ante el Ontinyent por 4-0, pero su calendario y el tener que jugar seis de los diez partidos en casa le hacen ser más optimista.
Mal calendario
El Eivissa empieza su particular 'vía crucis' contra cuatro de los 'gallitos' del grupo. Este fin de semana tiene que enfrentarse en el Mini Estadi al Barcelona B de Luis Enrique, un equipo que ha ido de menos a más y que ahora está a sólo un punto de los puestos de ascenso. Los azulgrana están en racha, como demuestra el hecho de que sólo ha perdido uno de los últimos 19 partidos ligueros. La siguiente jornada recibe en casa al líder, el Alcoyano, un equipo que en la primera vuelta venció a los rojillos por 4-0, un resultado que supuso la destitución fulminante ese mismo día de Joan Francesc Ferrer, Rubi. Las jornadas 31 y 32 le toca jugar ante Lleida y Badalona, dos equipos que ocupan el sexto y el séptimo puesto, respectivamente, y que aspiran a colocarse entre los cuatro primeros.
Una vez superado esos cuatro escollos, el calendario se suaviza para el Eivissa. No obstante, sus siguientes partidos son, con excepción del encuentro ante el Ontinyent en la penúltima jornada, ante rivales directos por la permanencia. Terrassa y Valencia Mestalla visitan Can Misses, mientras que los ibicencos juegan fuera ante Gavá, Alzira y, en la última jornada, Orihuela. El Eivissa tiene actualmente 25 puntos y la permanencia, teniendo en cuenta temporadas anteriores, se cifra en 45. Eso significa que el equipo rojillo debe ganar 20 de los 30 puntos que aún restan por disputarse, es decir el 66,6 por ciento de los puntos en juego; una misión casi imposible. «No podemos bajar los brazos y seguimos pensando que, mientras hay vida, hay esperanza. Tenemos que ir a muerte hasta el último instante y si al final no se consigue el objetivo por lo menos podremos decir que hemos competido con dignidad», declara Tolo Darder, director deportivo de la SE Eivissa. Darder reconoce que el resultado ante Osasuna B fue un auténtico «varapalo», pero que la directiva sigue confiando en el entrenador y los jugadores. «Alfredo tiene toda nuestra confianza. No se están dando los resultados, pero vamos a seguir confiando en que éstos finalmente llegarán. En cuanto a los jugadores, ayer bajamos con el presidente al vestuario para dar ánimos y pedir el máximo esfuerzo en las próximas semanas», añade.
Fortín en casa
La Peña, por su parte, se juega la permanencia en casa. El conjunto que dirige Cristóbal Parralo necesita al menos 16 puntos para lograr la salvación y 18 de los 30 que están en juego se deciden en el Municipal de Santa Eulària, que debe ser un auténtico fortín. Este fin de semana llega la primera final en su partido ante el Orihuela, en una nueva oportunidad para intentar salir de los puestos de descenso. En ese partido, Cristóbal tendrá las bajas por sanción de Raúl Casañ y Neftalí, que fueron expulsado ante el Ontinyent, y la de José Ruiz, que vio su quinta cartulina amarilla ante los alicantinos. Benidorm, Lleida, Sant Andreu, Villarreal B y Osasuna B son los otros equipos que tienen que pasar por el Municipal. Por contra, la Peña visita al Sabadell, Gramanet, Atlètic Balears y Dénia.
«Todas las semanas son finales y los partidos son a cara de perro. El domingo tenemos otra contra el Orihuela y al siguiente tocará una más. De todas formas, los jugadores están convencidos de que podemos salvarnos. A ver si el paso hacia atrás de esta semanas ante el Ontinyent sirve para dar tres adelante», declara Cristóbal. Sobre los arbitrajes, el técnico dice que «no quiero pensar que hay una persecución en contra de la Peña, pero este arbitraje ha sido el peor que hemos tenido».