Àrea 11
En el fútbol hay partidos en los que un equipo hace las cosas bien pero acaba cediendo los tres puntos en liza por una cuestión de detalles. Esto es lo que le pasó ayer a la Peña Deportiva, que mereció mejor suerte en su visita al Nou Municipal de Santa Coloma pero que tiene que regresar a la isla con una nueva derrota en el casillero, algo que le acerca un poco más al 'infierno' de la Tercera División. Los futbolistas del técnico Cristóbal Parralo jugaron un encuentro muy completo pero les faltó un par de cosas: acierto rematador y más seguridad en defensa, sobre todo en las acciones a balón parado, en la que la zaga ibicenca no se mostró suficientemente contundente. No es poca cosa, porque, por lo demás, los ibicencos pusieron ganas, fuerza y fútbol. Pero lo que mandan son los resultados y éstos condenan un poco más las opciones de permanencia del conjunto ibicenco.
El partido se inició con una Peña Deportiva presionando el centro del campo de la Gramenet, que se veía incapaz de buscar alguna solución para enlazar varios pases seguidos. Cristóbal había puesto 'músculo' en el centro del campo con un trivote formado por Derek, Ondina y el capitán Raúl Casañ. Entre los tres lograron ahogar la creatividad de la 'Grama', anulando especialmente al siempre peligroso Monty, uno de los jugadores fundamentales del equipo catalán. Además, la banda derecha ibicenca funcionaba muy bien, tanto en defensa como en ataque. José y Guirado se complementaban perfectamente y eran los que llevaban el peso del partido. Sin embargo, no se producía ocasiones de gol claras por parte de ningún equipo. Tan sólo en los primeros diez minutos, la Peña ya había lanzado dos saques de esquina y únicamente con estas acciones ya pusieron nerviosos a los aficionados de la Gramanet, que no las tenían todas consigo.
Y es que los de Cristóbal estaban muy cómodos en el terreno de juego y se llevaban los rechaces y las segundas jugadas. En una de ellas, el centrocampista asturiano Ondina, uno de los destacados del partido, disparó tras recoger un mal despeje catalán y su lanzamiento se fue cerca del palo de la portería defendida por Barragán.
Gol en contra
No obstante, todo cambió a la media hora de juego. Pugui botó una falta por la banda izquierda y los defensas ibicencos no acertaron a despejar el balón, que llegó al central catalán Jorge que, con un acrobático remate, puso el 1-0 en el marcador del Nou Municipal. Demasiado castigo para una Peña que estaba cuajando hasta entonces un gran partido.
Este tanto, sin embargo, y a pesar de llegar en el peor momento para los visitantes, no hizo mella en el ánimo de los futbolistas del conjunto ibicenco, que a punto estuvieron de empatar dos minutos después cuando Buti remató un córner que fue despejado in extremis por un defensa en la misma línea de gol. De nuevo, por mediación de un nuevo lanzamiento de esquina, Derek protagonizó otra ocasión de gol que Barragan desbarató con acierto.
Esa fue la gran diferencia entre los dos equipos. Ambos conjuntos ponían en dificultades al rival a través de jugadas a balón parado, pero mientras la Peña no materializaba sus ocasiones, la Gramenet se mostraba muy efectiva.
La segunda mitad se inició bajo los mismos parámetros: los locales resguardando el resultado y la Peña intentando empatar, aunque sin crear ocasiones claras de gol. Cristóbal movió ficha y puso en el campo a dos jugadores más ofensivos: Adrián Ramos y Tino, que entraron por Derek y Heredia, respectivamente. Estos cambios surtieron efecto y se vio a un equipo más atacante e incisivo, con más hambre ofensiva y que ponía en dificultades a una defensa local que se conformaba con rechazar estos intentos.
Y cuando mejor estaba la Peña, llegó un nuevo varapalo, el definitivo. Raúl Casañ hizo una falta infantil al borde del área. La pelota estaba situada en una zona ideal para un zurdo y la Gramanet cuenta con un jugador con una pierna izquierda de muchos quilates, el goleador Meca. Su lanzamiento superó la barrera y se coló en la portería de Pociello, que sólo pudo mirar cómo el balón se colaba en su portería.
En definitiva, un encuentro más en el que la Peña Deportiva ha demostrado que tiene fútbol para esta categoría pero que le falta la suerte necesaria para poder transformar su buen hacer en puntos. Lo malo es que cada vez tiene menos oportunidades para conseguir la permanencia en la categoría.