El Space Gasifred echa este sábado (17,30 horas, Blancadona) a andar contra el Tobarra y con una gran duda en el aire. ¿Debe conformarse con la permanencia o luchar por entrar en el 'play off'? El club fue claro a la hora de definir el objetivo del primer equipo, la salvación, pero los jugadores, sobre todo las incorporaciones realizadas este verano, no se conforman con eso y hablan de clasificarse para la fase como única meta.
Está claro que no es nada fácil repetir la proeza de la temporada pasada, en la que los ibicencos, recién ascendidos de categoría, consiguieron colarse entre los cuatro primeros y participar en el 'play off' de ascenso a División de Honor por primera vez en su historia. Sin embargo, varios miembros del plantel, entre ellos el ambicioso Leo Feitoza y Àlex del Amor, ya comentaron que su idea no era venir a conseguir sólo la salvación, sino a algo más. Pero eso no será fácil y no por el hecho de que esta plantilla sea inferior a la anterior, sino porque la División de Plata se ha convertido en un club selecto esta temporada.
Si la segunda categoría nacional era el año pasado un reclamo de estrellas, este año el nivel es aún mayor al haberse reducido a un solo grupo. Así pues, sólo los mejores tienen cabida en esta División de Plata, en la que se producirán muchas sorpresas a lo largo de la temporada.
En el Gasifred han causado baja el ala Vega (Fisiomedia Manacor), el cierre Flavio (Gáldar), el pívot Carrión (Tobarra), el guardameta Julio (Torre de los Reyes) y el ala-cierre Mario Salado, este último por motivos laborales. Sus puestos los ocuparán ahora el portero Juanan (Fisiomedia Manacor), el cierre Àlex del Amor (Reale Cartagena), el ala-pívot Chano (Àfrica Ceutí) y los brasileños de banda Celino Alves y Leo Feitoza, estos dos últimos procedentes del Gijón El Llano.
Cuerpo técnico
También se han producido cambios en el cuerpo técnico. Hugo Nava (Gijón El Llano) sustituye a Juan Carlos Bartual (Tobarra) como entrenador. El preparador físico Daniel Tejedor es la gran novedad y suplirá la vacante dejada por Óscar García, quien hacía también las veces de segundo entrenador.