Solo ante el peligro. Como si del mismísimo Gary Cooper se tratara, Eusebio Noguera afrontará solo, en lo que a representación ibicenca se refiere, el durísimo Marathon des Sables entre los días 1 y 11 de abril, una carrera de larga distancia formada por 250 kilómetros a pleno sol en el desierto del Sáhara marroquí. Si el año pasado acudió acompañado de Dani Serra, en esta ocasión se desplazará y participará en solitario, sin pistolas ni estrellas de sheriff, pero con una ilusión y capacidad de sacrificio enormes.
El objetivo es ambicioso: «Quiero acabar entre los 300 primeros». En la edición anterior finalizó en el puesto número 757. «Fui por curiosidad, porque me gusta el deporte de aventura y lo he visto en televisión. La verdad es que me tuve que arrastrar casi toda la carrera para llegar al final y, en esta ocasión, quiero disfrutar de ella corriendo», afirma el delegado insular de triatlón.
Preparación
Noguera se ha preparado a conciencia. «Con la ayuda de Javi Bonet y Juan del Valle, con el que he trabajado la musculación y potenciado una parte del cuerpo que, hasta ahora, no había trabajado, llego bien a la cita y con ganas de empezar a correr por el desierto», afirma Eusebio, que se muestra optimista por los resultados recientes. «Fui en febrero al Maratón de Barcelona y rebajé mi marca personal en ocho minutos», recuerda.
Para conseguir el objetivo de finalizar entre los 300 primeros, el corredor tiene claro el camino a seguir: «El error del año pasado estuvo en ir lento. Tampoco se trata de correr muy rápido, pero hay que llegar cuanto antes a la meta. Así, tienes más tiempo para descansar, estás menos horas bajo el sol y los pies permanecen menos tiempo sobre la arena. Hay que completar cada etapa cuanto antes para así preparar mejor la jornada siguiente».
Eusebio Noguera emprenderá rumbo a Marruecos el próximo viernes. Saldrá en el avión de las 09,00 horas con destino a Madrid, donde tomará un vuelo chárter, fletado por la organización del Marathon des Sables, con destino a tierras marroquíes. Tras el aterrizaje, un autobús le conducirá al desierto del Sáhara, donde pemanecerá un día y medio de acampada para ir aclimatándose antes de comenzar la competición el domingo día 3.
Un total de 250 kilómetros en seis etapas maratonianas
El Marathon des Sables es una carrera a pie, por etapas, con autosuficiencia alimenticia y libertad de ritmo, sobre una distancia de 250 kilómetros aproximadamente. Cada participante debe cargar su equipo, que incluye la comida y el material obligatorio. Es una prueba deportiva, pero sobre todo un reto personal, una lucha contra el calor, la distancia, la arena del desierto y la mente. El evento cuenta con seis etapas. La primera tiene unos 30 kilómetros; la segunda, 36; la tercera, 40; la cuarta, 82, la quinta, 42; y la sexta, 20. El terreno es desértico variado, con piedras, zonas de antiguos lagos secos y, sobre todo, dunas de arena.
Un despliegue de 400 personas
Patrick Bauer es el director y creador de la prueba, organizada por Atlantide Organisation International. Más de 400 personas se distribuirán el trabajo diario. Más de 50 médicos supervisarán y cuidarán constantemente a los corredores. Dos helicópteros sobrevolarán el recorrido. 120 vehículos patrullarán permanentemente cerca de los participantes. Un equipo se encargará de montar y desmontar el campamento y un camión incinerador de basuras seguirá la competición para que el desierto regrese a lo normalidad después de el paso de los corredores.