El domicilio de la ciclista francesa Jeannie Longo fue registrado hoy por gendarmes de una unidad de lucha contra el dopaje y su marido y entrenador, Patrice Ciprelli, fue retenido para su interrogatorio, revela el diario deportivo «L'Équipe».
Una decena de agentes de la Oficina Central de Lucha contra Delitos contra el Medio Ambiente y la Salud Pública (OCLAESP) llegaron esta mañana al domicilio de la pareja en Saint-Martin-le-Vinoux (departamento de Isère, sureste), según precisa el diario.
Los agentes buscaban en el domicilio de la pareja pruebas de presuntas adquisiciones de EPO «de un suministrador extranjero», agrega la fuente.
Longo, de 53 años, tiene un palmarés en el que lucen 13 títulos mundiales, otro olímpico y cerca de sesenta nacionales, entre ellos el vigente trofeo de campeona de Francia contrarreloj.
El pasado noviembre había sido absuelta por la Federación Francesa de Ciclismo (FFC) de una sanción por haber contravenido tres veces las reglas de localización, lo que podría haberle supuesto hasta 2 años de suspensión.
Según «L'Équipe», la operación de hoy en su domicilio se produce después de que los agentes hayan identificado al menos cinco «operaciones sospechosas» llevadas a cabo por Ciprelli a través de un suministrador extranjero en 2010 y en 2011 y se enmarcan en una investigación abierta el pasado 14 de septiembre por la Fiscalía de Grenoble, en el sureste de Francia.
Sobre las tres últimas operaciones, que corresponden a 2011, los agentes han encontrado varias facturas de unos 500 euros cada una que relacionan una cuenta del marido de Longo con un paquete enviado por correo en el que había Eprex, es decir, EPO de primera generación.
Todavía no se ha podido vincular a Longo, que será interrogada en calidad de testigo, con las supuestas actividades ilegales de Ciprelli, aunque «los investigadores no están lejos de lograr establecer una posible relación», precisa el diario.
En caso de que así fuera, Longo -que renunció a correr el último Mundial de Ciclismo ante las sospechas de dopaje- vería amenazada su participación en los Juegos Olímpicos de Londres.
Antes de irrumpir en el chalet de la pareja, los investigadores habían interrogado discretamente y durante siete horas a la ciclista Edwige Pittel, rival de Longo que Ciprelli entrenó en 2007, y al presidente y secretario general de la Agencia Francesa de Lucha contra el Dopaje (AFLD), Bruno Genevois y Robert Betrand, respectivamente, agregó esa fuente.
Los agentes descartaron cualquier implicación de dichos testigos, agrega el diario, que señala que quien sí podría tener «serios problemas» es el director de la selección francesa de ciclocross, Michel Lucatelli.
Este «íntimo amigo» de Ciprelli habría recogido un correo para él y podría ser interrogado a lo largo de la jornada, al igual que la madre del entrenador, cuya dirección aparece en otra de las transacciones, agrega el diario.
El Ministerio de Deportes francés, para el que Ciprelli trabaja a tiempo parcial, guarda un «silencio ensordecedor» sobre el caso, lamenta «L'Équipe», que revela que la última compra de EPO se produjo el pasado mes de mayo, es decir, poco antes del Campeonato de Francia en el que Longo logró el título de contrarreloj.
Meses después, en septiembre, el exciclista estadounidense Joe Papp, imputado en 2007 por tráfico de sustancias dopantes, confesó que vendió ese mismo año eritropoyetina (EPO) china a Ciprelli a través de internet, según reveló la misma fuente.
Un día después, la fiscalía abrió la investigación que ha dado lugar a la operación de hoy.
Longo ya dio positivo por efedrina en 1987, pero desde entonces no se había vuelto a cuestionar la ética deportiva de este ídolo del deporte francés.