El Año II del Club Voleibol Eivissa en la máxima categoría del voleibol masculino nacional arrancó ayer en el lujoso restaurante Montauk de la Torre Ushuaïa, en Platja d'en Bossa, con la firma del convenio de colaboración con el grupo hotelero y la presentación oficial del equipo que volverá a dirigir el técnico argentino Toni Gino.
El presidente de la entidad amarilla, Javier Escandell, trazó a lo largo de un discurso salpicado de ilusión, pero también de crudo realismo –el club estuvo a punto de no inscribirse por la falta de apoyos–, las líneas de un proyecto para el que se espera el aliento de toda la Isla.
La crisis económica que ha minimizado las pretensiones de la mayoría de clubes –y que incluso amenaza la continuidad de históricos como el Numancia CMA Soria– permitirá a equipos como el Ushuaïa Ibiza Voley ser la alternativa a un campeonato que vienen repartiéndose los dos colosos del voleibol nacional: Unicaja Almería y CAI Teruel.
Si el año de su debut en Superliga el conjunto ibicenco se erigió como la auténtica revelación, colándose en una Copa del Rey que se encargaría de organizar, y cerrando el curso con un notable quinto puesto, el segundo ejercicio tiene como principal desafío colarse en el play off por el título de Liga. Así lo manifestó Javier Escandell durante su intervención en las instalaciones del esponsor principal del equipo.
«Jugar una final son palabras mayores. Pero el objetivo es disputar el play off al título. Creo que podemos llegar, pero hay que lucharlo, y creo que podemos volver a clasificarnos para la Copa del Rey», destacó el máximo mandatario del club, quien estuvo flanqueado en la rueda de prensa por Abel Matutes y Carmen Matutes, en representación de Ushuaïa, junto a su fundador y director artístico, el francés Yann Pissenem.