El Ushuaïa Ibiza Voley acaricia ya la clasificación para la próxima edición de la Copa del Rey después de superar por 3-0 al VP Madrid. El equipo ibicenco hizo buenos todos los pronósticos y se impuso al conjunto madrileño sin ceder ningún set. Eso sí, tuvo que ponerse el mono de trabajo en la segunda manga para evitar que el partido se alargara y que los fantasmas de una posible derrota sobrevolara por el pabellón de es Viver.
Al cuadro de Toni Gino, además del incombustible Edmond Solanas, le funcionó a la perfección el ‘plan B', que fue precisamente sobre el que se cimentó la victoria. Arthur Borges y Christian López, que, con un papel secundario, suelen pasar más tiempo en el banquillo que dentro de la pista, se convirtieron en los auténticos protagonistas del encuentro ante la ausencia de Nicolás Ronchi y Pablo Dus, a los que el míster pudo reservar para que terminaran de recuperarse de sus respectivas lesiones y evitar males mayores.
El partido comenzó bajo el guión previsto, con el cuadro local mandando en el marcador y marchándose al primer tiempo técnico con una buena renta (8-4). La distancia creció hasta los ocho puntos (13-5), con Solanas y Borges liderando el paseo. Un ‘ace' de Christian López puso fin a una primera manga de claro color amarillo (25-18).
El segundo set siguió los mismos derroteros, pero sólo en el arranque. No en vano, del 4-1 inicial se pasó a un 8-9, que supuso la primera ventaja de los visitantes en el encuentro. Los madrileños llegaron a alcanzar una ventaja de tres puntos (11-14 y 12-15), pero los pupilos de Toni Gino reaccionaron para igualar la contienda (19-19). Un nuevo estirón de los de Aitor Barreros dejó a los ibicencos en una situación inesperada, con un 20-24 en contra. Cuando todo hacía indicar que se produciría el empate, la mejor versión de Borges, con tres puntos consecutivos, un error visitante, un bloqueo de Elvis y un remate final de Giménez dieron pie a una remontada memorable (26-24).
El golpe dejó noqueado a un VP Madrid que vio cómo su rostro cambiaba en un abrir y cerrar de ojos. De la alegría pasó a la tristeza. Y ya no supo reponerse. El subidón de los pitiusos les puso las pilas para cerrar el partido por la vía rápida, dejando la confianza a un lado. En la tercera manga, el Ushuaïa Ibiza Voley se marchó con cuatro puntos al primer tiempo técnico (8-4) y se escapó pronto de nueve (14-5) con un remate de Giménez. La renta máxima llegó a ser de 11 puntos (21-10 y 22-11). Con el partido totalmente visto para sentencia, Cardenache y Ochoa tuvieron su oportunidad en un tercer set que finalizó con un claro 25-16.