David Lózano es, a sus 15 años, una de las jóvenes promesas que empieza a despuntar en el panorama del atletismo pitiuso. A su corta edad, y en su primer año como juvenil, el corredor del Sa Raval ya ha dado algunas muestras de su valía.
Una de ellas fue en la última edición Cursa Flor d'Ametller, celebrada el pasado 21 de febrero en Santa Agnès, donde ocupó la vigésima posición absoluta en una distancia de 7.500 metros. «Me resultó un poco larga, ya que estoy acostumbrado a carreras de 800 y 1.500 metros, pero me va bien para mi preparación», señaló el atleta de Sant Antoni.
Otra muestra de sus cualidades fue cuando, todavía en categoría cadete, consiguió la mínima para acudir el año pasado al Campeonato de España de verano. En la cita disputada en Valladolid, Lozano compitió en la prueba de 600 metros. Cayó en semifinales al quedar tercero, pues sólo los dos primeros lograban el pase a la final. «Fui primero la primera mitad de la carrera pero me avanzó un corredor y luego, en el último metro, me pasó otro y no pude estar en la final», lamenta. Además, recuerda con rabia que en la final «nadie atacó y fue una carrera lenta, en la que habría tenido muchas opciones».
Tras esa experiencia, espera poderse quitarse la espina en el Campeonato de España del próximo verano. Para el de invierno, celebrado la pasada semana en Salamanca, se quedó cerca de la mínima para participar en la prueba de 800 metros lisos. «Tuve una lesión, una tendinitis en el psoas, que sólo me ha dejado hacer tres veces esta prueba en todo el invierno, pero ahora estoy bien y he bajado hasta los 2'07'' cuando la mínima estaba en 2'00''», explica el atleta del Sa Raval.
Con esfuerzo y dedicación, confía en recortar esa diferencia en los próximos meses. «Para el de verano la mínima es de 1'59'', pero si las cosas van bien creo que podré conseguirlo», afirma. Una buena señal fue la buena marca que hizo este fin de semana en el Control Escolar y Federado celebrado en las pistas de Can Misses. Un 4'29''10 en los 1.500 metros lisos, prueba en la que sueña poder triunfar algún día, que invita al optimismo.
Su entrenador, Bartolo Torres, le anima a seguir la estela de otros grandes corredores y Lozano señala que sus referentes deportivos son Kevin López –campeón y plusmarquista español de los 800 metros– y David Bustos, especilista mallorquín de los 1.500 metros que entrena en Eivissa bajo las órdenes de Toni Roig. No obstante, reconoce que su gran ídolo es el velocista jamaicano Usain Bolt. «Es impresionante», dice.