A todas las tribulaciones a las que se enfrentan los pilotos pitiusos de motocross, pendientes hace años de algún avance en el proyecto de circuito en Sa Coma, estos últimos días se ha añadido un nuevo temor: la posibilidad de no poder utilizar el circuito provisional de Sa Coma a lo largo de todo el verano. La alarma ha cundido entre este colectivo, que ha expresado en las redes sociales su recelo ante una hipotética normativa estival contra la sequía que impediría regar el circuito provisional, acción imprescindible para la adecuación y mantenimiento del lugar donde entrenan decenas de pilotos.
El delegado insular, Elías Escandell, manifestó conocer este creciente temor, aunque confesó no disponer de ninguna confirmación oficial. «Lo hemos oído, sería un problema añadido pero aún nadie no nos han dicho nada al respecto», comentó.
Ante esta situación, espera que las administraciones locales aclaren pronto si podrán seguir regando el circuito. «Seguiremos solicitando el riego y que se hagan las reparaciones necesarias para mantenerlo [el circuito provisional de Sa Coma] en una mínima normalidad y con unas mínimas condiciones de seguridad».
En este sentido, Escandell anunció el acuerdo con el presidente de la Federación Balear de Motociclismo, Pedro Mas, para que el ente autonómico asuma el coste de una nueva operación de rastrillado del terreno que una excavadora efectuará en los próximos días. «Está muy degradado y tiene muchas piedras, lo que provoca averías en las motocicletas y resta seguridad», añadió sobre una situación que ya denunció semanas atrás.
Respecto al proyecto definitivo de Sa Coma, el delegado insular se mostró «escéptico» tras un año sin avance alguno. «Los meses van pasando y no tardaremos en cumplir el primer año de legislatura de este gobierno y no nos consta que se haya empezado nada, ni el concurso para elaborar el proyecto, que sería el primer paso antes de licitar cualquier obra», lamentó Escandell, quien añadió que «[los pilotos] contentos no estamos».
Además, la delegación ha descartado dar ningún paso respecto a los dos terrenos –en Platja d'en Bossa y Santa Eulària– que barajaba como alternativa provisional a Sa Coma. «No debemos entrar en el juego al que nos quieren llevar los políticos de que debemos buscar un terreno. Ya lo tenemos y está en Sa Coma», sentenció.