Alrededor de 250 personas arroparán mañana al Formentera en el Ramón Sánchez Pizjuán con motivo del partido de vuelta de dieciseisavos de final de la Copa del Rey. El club ha vendido las 195 que tenía para el sector P3 de Preferencia y también ha repartido las 50 invitaciones que el club hispalense le había cedido.
Los seguidores rojinegros se desplazan por cuenta propia. Ayer, el primer equipo viajó con poquísimos fieles. Entre ellos, eso sí, se encontraban el expresidente Felip Portas, acompañado por su familia, y Jaume Ferrer, presidente del Consell de Formentera. También un par de aficionados de origen extranjero que tienen claro que el encuentro es «para disfrutar» porque «no hay posibilidades de ganar».
En la misma línea se pronunció Portas. Preguntado sobre las posibilidades de los suyos, indicó: «Cero». Más claro, el agua. El exdirectivo apuntó que «como decían los aficionados del Sevilla aquí, vamos a convivir y a ‘conbeber'». El objetivo es «disfrutar» de un encuentro histórico que, además, «supone el mayor desplazamiento de aficionados del equipo en la historia».