UD IBIZA: 0
LINENSE: 0
Empate a nada en Can Misses. Eso fue lo que hubo ayer en el duelo entre la Unión Deportiva Ibiza y la Balompédica Linense. Ninguno de los dos equipos encontró el camino hacia el gol en un partido muy igualado y en el que las ocasiones escasearon. Eso sí, no es que no lo intentaran ambos equipos, que dejaron detalles de calidad en la elaboración pero persistentemente el último pase.
Habitualmente, un encuentro que acaba 0-0 suele ser aburrido, más que nada porque la salsa del fútbol es el gol sin lugar a dudas. Sin embargo, hay algunos, como el de ayer, que no dejan tan mal sabor de boca. Y eso pese a las pocas oportunidades de gol.
Tal como era de esperar, Andrés Palop apostó por el mismo once inicial que tan buen resultado había dado en las dos jornadas anteriores, saldadas con victoria contra el Marbella (4-0) y el Talavera (0-2). El técnico había advertido el viernes que estaba abierto a cambios si encontraba en su plantel algún arma distinta con la que hacer daño a su rival, pero ayer no fue el caso y dio continuidad a los que venían haciéndolo bien.
En la primera parte, los ibicencos dominaron tímidamente a su rival, que gozó de las mejores oportunidades. Pirulo, que hizo mucho daño a la zaga local al igual que Gato por la banda derecha, fue el primero en avisar con un zapatazo desde 25 metros que Álex repelió a córner a los diez minutos. Mediado este tiempo, una jugada de estrategia a la salida de córner silenció el estadio. Pierre disparó raso desde la frontal del área y el balón llevaba marchamo de gol, pero la zaga local sacó lo sacó sobre la línea de gol.
El Ibiza no replicó hasta el minuto 27, en una acción en la que el disparo de Javi Serra acabó casi convirtiéndose en un pase a Rodado, que tampoco pudo batir al portero por la oposición de un defensa. Pero la última de este periodo la volvió a tener la Balona en un lanzamiento sin consecuencias de Juampe desde el vértice del área en el minuto 33.
Tras el descanso, los visitantes llegaron a dominar un poquito más el juego que los unionistas, pero lo cierto es que les faltó profundidad. Andrés Palop veía que los suyos no acababan de encontrarse cómodos y trató de dar otro aire a los suyos con la entrada de Riverola, primero, y Borriello, después, por Núñez y Rodado respectivamente. También dio entrada a Armenteros por Chavero en el 78. No es que cambiara el decorado, pero lo cierto es que las dos mejores ocasiones de los unionistas llegaron en la recta final.
Sana lanzó sorprendentemente a las nubes un disparo en el interior del área en el minuto 82 y la Udé despertó de su letargo. Dos más tarde, Borriello rozó el 1-0 en un cabezazo a la salida de un córner que Chico despejó cuando la pelota se disponía a besar las mallas. Al borde del descuento, Javi Serra disparó en el área pequeña y, cuando ya se cantaba gol, el esférico fue al cuerpo del portero. Ahí murió un partido de poder a poder en el que el reparto de puntos hizo justicia.