El Ushuaïa Ibiza Vóley se reencontró ayer con la victoria en Melilla (0-3). Los de Piero Molducci hicieron valer su superioridad para pasar por encima de un rival que en ningún momento pudo hacerle frente sobre el parqué.
Los ibicencos salieron muy enchufados al polideportivo norteafricano y pronto abrieron hueco en el marcador. Otra vez sin Henry Omar Tapia, Elvis, Sugrañes y Juanmi fueron los encargados de soltar el brazo. El primer set (13-25) fue un claro aviso de lo que venía por delante: un ciclón amarillo.
En el segundo acto, las cosas no cambiaron y los pitiusos volvieron a ser un rodillo. El 1-4 de salida dejó claro que el cuadro melillense no tenía nada que hacer en la tarde de ayer. El juego coral ibicenco destrozó a los locales, que vieron cómo la segunda manga también volaba para la isla (17-25).
En la tercera, los chicos de Piero Molducci se encargaron de que la agonía melillense durase lo menos posible. 14-25, set, partido y regreso para Ibiza.
El Ushuaïa regresa a la senda de la victoria tras las dos derrotas consecutivas sufridas ante el Vecindario y el Teruel. El nuevo proyecto amarillo, que sueña con pelear por todo, vuelve al camino correcto.