Juan Carlos Carcedo, entrenador de la UD Ibiza, vio un partido «muy disputado» y en el que «no hubo muchas ocasiones». El técnico celeste, eso sí, considera que los suyos igual hicieron más para ganar: «Está claro que no hubieron muchas ocasiones para ninguno de los dos equipos. Quizá nosotros tuvimos un poquito más de dominio y a los puntos habríamos ganado, pero es lo que ha sido y no se puede echar atrás».
El técnico no considera que el campo haya influido en el juego: «No es una excusa. Es una dificultad que sabíamos que íbamos a tener y había que adaptarse. Era igual para los dos. El partido se podía haber decidido por pequeños detalles. No hemos podido meter las que hemos tenido».
El míster sí dijo que era difícil jugar porque se produjeron «muchas interrupciones desde el principio, sin continuidad en el juego». Además, no se mostró para nada preocupado por la falta de gol en las dos últimas jornadas, en las que los suyos no han visto puerta: «Sé que tenemos gente que es capaz de materializar las ocasiones. Me preocuparía si no las tuviéramos. Hay que trabajar para ser un poco más eficaces. El equipo ha puesto esfuerzo y ha estado atento a detalles y segundos balones, pero no hemos acertado y de ahí el empate».
A Carcedo no se le queda un regusto amargo tras haber cerrado el año con dos empates consecutivos porque «todo el mundo habría firmado estar ahora en esta posición y con estos puntos». «Veinte puntos antes de Navidad es para estar orgulloso», sentenció el preparador del equipo unionista.