La reforma del Estadio Municipal de Can Misses está próxima a comenzar, de hecho todo hace indicar que las obras empezarán el próximo lunes. En un mar de dudas, sobre cómo será el acuerdo de cesión entre el Ayuntamiento y la UD Ibiza para el uso de la instalación, el club ya se ha puesto manos a la obra para intentar llegar a la primera jornada de liga, prevista para el fin de semana del 14 de agosto, con todo preparado para poder jugar en casa. Si bien es cierto, que en caso de obras, LaLiga permite que los tres primeros partidos se jueguen como visitante.
Todavía queda mucho por saber, pero lo que sí se empieza a conocer es que el nuevo Can Misses contará con un aforo de 6.000 espectadores, según fuentes del club. LaLiga obligará a cambiar prácticamente todo. Los accesos, las torres de iluminación, las gradas, las cabinas de prensa… el fútbol profesional ha desembarcado en Ibiza y la instalación actualmente no es válida para esta empresa. Empezando por el terreno de juego. El césped artificial será sustituido por hierba natural, como impera LaLiga.
La gran incógnita es el uso del estadio. Desde la UD Ibiza defienden que el convenio debe ser de exclusividad, aunque en el reglamento oficial no aparece el término «exclusividad». La normativa de LaLiga recoge en su artículo VI.1 para clubes y sociedades anónimas deportivas de nueva incorporación lo siguiente: «Es requisito necesario e imprescindible para afiliarse a la Liga por parte del club o Sociedad Anónima Deportiva la presentación del título de propiedad sobre el recinto deportivo en el que vaya a desarrollar la práctica de la competición profesional; o en su caso, el convenio de uso firmado entre éste y la propiedad del recinto deportivo. Si no fuere presentado dicho título de propiedad o el citado convenio, será denegada la inscripción».
Así pues, no hay duda de que este «requisito imprescindible» se llevará a cabo, ya que el Ayuntamiento señaló que no va a perder esta oportunidad histórica de tener un equipo en Segunda y que se buscarán las fórmulas. Este viernes, desde el Consistorio aseguraron que se está trabajando y estudiando bien la situación y su repercusión para la ciudad; y cuando esté claro se explicará todo. Por lo pronto, este viernes se pudo ver al técnico de Deportes del Ayuntamiento, Lluís Lliteras, junto a a un empleado de la UD Ibiza.
Uso del campo
No hay certezas, pero todo hace indicar que con el cambio del césped, que necesita un cuidado especial y un menor uso, Can Misses quedará en manos de la UD Ibiza para que pueda disputar sus encuentros en el fútbol profesional y que tocará buscar acomodo para el resto de equipos que utilizaban la instalación.
Entre estos está el recién ascendido CD Ibiza, que la próxima campaña estrenará la Segunda RFEF. En Vila no hay muchas más opciones, así que Can Cantó podría pasar a ser la nueva casa de los rojillos pese a la tranquilidad que mostraron estos días. Tampoco se descarta que el Ayuntamiento busque la colaboración de otros municipios y que puedan terminar jugando en otro de los campos que tiene la isla.
Además, hay que buscar sitio para los equipos base que también jugaban y entrenaban en Can Misses. Aquí la UD Ibiza podría optar por llegar a un acuerdo con su club filial y mandar a los jugadores de la academia a San Rafael.
También se desconoce que ocurrirá con el campo de rugby que está en el interior de la pista de atletismo de Can Misses. Bien es sabido que el club celeste anhela ese espacio como lugar de entrenamiento. Parece complicado que el Ayuntamiento vaya a expulsar de este recinto a los equipos de atletismo por lo que podrían acabar compartiendo dicha instalación. En cuanto al Ibiza Rugby, cabe recordar que es uno de los clubes que actualmente está bajo el paraguas de la UD Ibiza y que hay muy buena sintonía entre ambas directivas, aunque no hay que olvidar que en este terreno también juega el Inter Ibiza.