La victoria contra el Eibar (2-0) dejó una gran noticia en las filas de la UD Ibiza. Ganarle al líder ya es de por sí solo un hecho destacable, pero más lo es sin recibir ningún gol en contra. Sobre todo, si se tiene en cuenta las dificultades que estaba teniendo el equipo en ese apartado, encajando con relativa facilidad en los últimos encuentros.
El equipo llevaba sin dejar su portería a cero desde el 22 de enero, cuando se goleó en La Rosaleda al Málaga (0-5). Es decir que eran más de dos meses viendo como el rival celebraba al menos un gol. En concreto, 10 encuentros de manera consecutiva.
La llegada de Paco Jémez potenció al equipo y le dio unos resultados que le hizo acercarse a la lucha por el playoff. La mejoría fue más que evidente en el aspecto ofensivo, pero también es cierto que el equipo, mucho más alegre, también sufrió en defensa. De hecho, en las 14 jornadas en las que el técnico se ha sentado en el banquillo al frente de los celestes, solo en dos se ha dejado la portería a cero: contra el Málaga y contra el Eibar.
Este último encuentro ante los vascos ha sido probablemente el mejor de la temporada. El equipo funcionó bien en ataque, algo que suele ser habitual porque si se encaja mucho, se marca más. Los ibicencos son el equipo más goleador de esta segunda vuelta con 27 tantos a favor. Más allá de esta facilidad anotadora, el partido contra el Eibar dejó un despliegue defensivo importante, especialmente si se tiene en cuenta que el rival era el líder de la categoría.
Mantener esta mejoría
El propio Jémez reconoció en la rueda de prensa posterior al choque que su equipo necesitaba una victoria así para alejar cualquier duda y volver al camino. Ante el Eibar salió todo y se rompió con la mala racha que arrastraba el equipo de la mejor manera posible.
No es ningún secreto que la principal asignatura pendiente de los isleños esta temporada ha sido la gran cantidad de goles encajados. Son 46 en 35 partidos, pero las cifras se han disparo en esta segunda vuelta, ya que la mitad, 23 goles, han llegado en 14 partidos. Especialmente duras habían sido las jornadas anteriores a este duelo contra el Eibar con 10 goles en tres encuentros.
Ahora, toca intentar mantener esa mejoría en la visita al Burgos, otro de los equipos revelación de esta temporada. Los burgaleses, un recién ascendido, también han hecho sus deberes y están en una posición cómoda, con solo un punto menos que los ibicencos.
No será un partido para nada sencillo. Los celestes visitarán uno de los campos más difíciles de la categoría, pero sí es cierto que se trata de un equipo que no es el más prolifero de cara a gol por lo que podría ser una buena oportunidad para volver a dejar la portería a cero.
Los pitiusos no logran encadenar dos jornadas sin recibir desde la primera semana de noviembre. Fue la única vez en la temporada en la que se logró esto y la racha, con Carcedo en el banquillo, fue de tres partidos: Alcorcón (0-2), Tenerife (0-0) y Real Sociedad B (0-1).