El bar del campo de fútbol de Can Cantó continúa sin adjudicarse y, por una u otra causa, ya son más de dos los años que lleva cerrado, concretamente desde el inicio de la pandemia a finales de marzo de 2020. Por entonces, obviamente tuvo que echar el cierre por el confinamiento de la población y las diferentes restricciones de la COVID-19, pero desde que las actividades volvieron al recinto no se ha vuelto a disponer de este servicio. Esto supone un problema para quienes asisten al campo para llevar a los niños o ver un partido, dado que carecen de la posibilidad de avituallarse si permanecen allí, al contrario que en otros campos de fútbol de la isla.
Tanto el Rápid como el Inter Ibiza querían hacerse con él, asunto que llegó el verano pasado al Patronato de Deportes del Ayuntamiento de Ibiza. Este, finalmente, decidió que se sometería a un proceso de licitación. Mientras tanto, se ha convertido en una oficina para los interistas, necesitados de más espacio tras su ascenso a Tercera RFEF. A día de hoy, sigue sin haber noticias al respecto. «Nos han dicho que está al caer», confesó esta semana Víctor Coronado, presidente del Rápid, que solicita que esto se solucione cuanto antes.
Coronado comentó que su entidad aceptó en su día la decisión de que se convirtiera el bar, el cual gestionaba antes de la pandemia, en una oficina para el Inter: «Llegó la pandemia y no se podían abrir los bares. Luego, subió el Inter y no había espacio para los dos clubes. El Patronato decidió convertir el bar en una oficina y unas mejores condiciones para el Inter, que acababa de subir, decisión que en un momento determinado respetamos y de la que no tenemos nada en contra. Se me explicó y todo nos pareció perfecto».
Sin embargo, considera que ya va siendo hora de que el campo tenga un bar. «Por circunstancias que entiendo que son lógicas y de legalidad, se nos dijo que saldrá a concurso público. Lo que pasa es que tenemos un campo con dos clubes, uno que mueve gente a nivel de cantera y otro que mueve gente al jugar en Tercera, y nos encontramos con que las familias no pueden ni tomar un café. Tú vas a campos cercanos como el de Sant Jordi, Can Misses 2, Can Misses o Jesús y todos tienen su bar, pero aquí no lo hay», lamentó.
El presidente del Rápid confesó que «en septiembre del año pasado se nos dijo que se sacaría a concurso de manera inmediata». Sin embargo, son ocho meses sin que esto se haya producido.
Coronado apuntó que «en la última conversación reciente que he tenido se me ha dicho que se está haciendo todo lo posible para que esté abierto el año que viene». «Para mí es una alegría de cara a las familias del Rápid, porque podrán disponer de un sitio donde tomar un café y esperar a sus hijos», sentenció.
En noviembre del año pasado, este periódico contactó con el Consistorio para abordar el tema y la respuesta fue la siguiente: «El Ayuntamiento de Ibiza tiene previsto redactar los pliegos de licitación e informaremos cuando salgan a licitación». Este viernes, en una nueva consulta, el Consistorio aseguró lo siguiente: «Este bar y ninguno de los bares de espacios deportivos no habían salido antes a concurso público. De hecho, desde el Ayuntamiento de Ibiza lo que se está haciendo es poner en orden esta circunstancia y aplicar el mismo criterio que se utiliza para los bares de las asociaciones vecinales, que es hacer un concurso público. En este sentido, se sacará a concurso público el bar de Can Cantó y el de Can Misses II. En este momento se están redactando los pliegos y el trabajo técnico, y saldrá en breve».