«La valoración es mala, pero no solo para el Racing, también para la competición. Creo que lo que ha pasado aquí es indignante. No por las decisiones si no por todo lo que ha ido pasando en el partido. Aquí todos hacemos para que nuestros equipos sean lo más competitivos posibles. Estaremos más o menos acertados, pero es vergonzoso que existan las decisiones que mi equipo ha tenido en contra. Ya son muchas, pero las de hoy han marcado el devenir». Así comenzó la rueda de prensa un Guillermo Fernández Romo muy molesto con el arbitraje del partido de ayer.
El técnico del Racing señaló que todo el mundo debe hacer autocrítica con su trabajo, pero «no nos damos cuenta que unos trabajos están condicionados con los otros». «A partir de ahí, el otro jugador decisivo, a parte del señor colegiado, ha sido el portero. No he visto a ningún portero en mi vida hacer cuatro paradas seguidas como las que ha hecho», continuó.
Sobre el partido propiamente dicho, señaló: «Creo que ha sido una primera parte de contención de los dos equipos. A nosotros nos ha faltado juego, darle un poco más de significado cuando teníamos la pelota. Lo hemos intentando arreglar en la segunda parte. El inicio era prometedor en las primeras acciones profundizando por la banda derecha. Después llegó la expulsión y te toca generar los procesos de otra manera y creo que ahí mi equipo también se ha impuesto. Hemos tenido las situaciones más claras y solo la última decisión ha condicionado el resultado.