El balonmano ibicenco está de dulce y el Handbol Club Eivissa se ha convertido en el buque insignia de un deporte que no para de crecer. Con el primer equipo asentado en División de Honor Plata, la segunda categoría del balonmano nacional, y llegando a soñar incluso con el ascenso a Asobal, la base tiene un espejo en el que mirarse. El HC Eivissa es un club de cantera, no en vano hay cuatro jugadores del primer equipo formados en la isla y son varias las promesas que ya han estado en los entrenamientos de Eugenio Tilves. Pero más allá del buen hacer del primer equipo, el club tiene claro que lo más importante es trabajar la base.
Fundado en 1999, actualmente cuenta con un total de 14 equipos desde categoría prebenjamín (cinco y seis años) hasta categoría profesional, además de contar con el colegio Sa Real donde se lleva a cabo la actividad de balonmano y que tiene otro equipo que aporta una veintena de jugadores. En total son unos 170 balonmanistas entre todas las categorías, con un staff técnico formado por 17 entrenadores titulados, dos de ellos profesionales, y dos preparadores de porteros. El club está creciendo y se acerca a los números anteriores a la pandemia, cuando sufrió un pequeño retroceso al ver parada su actividad.
También cabe destacar el importante impulso que se está dando al balonmano femenino. La entidad tiene claro que quiere ser también un referente dentro del balonmano femenino y están lanzando iniciativas interesantes para elevar el nivel, como la de que sus equipos femeninos jueguen amistosos en la península para medirse a equipos más potentes.