El Formentera ha caído este domingo en su visita al Mallorca B (2-1). Los pitiusos han caído en el campo del colista víctima de sus propios errores en un partido que tenían controlado y que se ha ido al traste en una acción de penalti y expulsión que ha sido definitiva. Con este tropiezo, los rojinegros caen de los puestos de playoff.
El Formentera salió con intensidad y muy bien plantado al terreno de juego. A los dos minutos, Gorriz no llegó por centímetros a un centro desde la izquierda cuando estaba en boca de gol. El buen hacer pitiuso se vio recompensado cuando en el minuto siete, Diego Díaz le puso verticalidad, apuró la línea de fondo y buscó un centro que acabó golpeando en la mano de David López. Penalti claro que el árbitro señaló. Ekiza fue el encargado de, con mucha tranquilidad, engañar al portero para poner el 0-1.
Tras este primer tanto, el encuentro entró en una fase mucho más pausada. El Formentera ya tenía el partido dónde quería y era ahora el Mallorca B el que tenía el control de balón. Eso sí, sin poner en apuros a Óscar Santiago. Los minutos iban cayendo y no pasaban muchas cosas en un terreno de juego en el que el viento era el gran protagonista.
A la media hora pudo llegar el segundo. En un saque de esquina, Facu Ballardo remató de cabeza completamente solo en el segundo palo, pero el balón se estrelló en el palo cuando Pere Joan ya estaba superado. Poco después el propio Facu Ballardo estuvo a punto de marcar en un balón que se terminó paseando por el área pequeña tras superar al guardameta.
Con el 0-1 se llegó al tiempo de descanso. Estaba cómodo el Formentera que sólo sufrió un poco en la recta final con un buen centro desde la derecha que despejó con apuros Óscar Santiago. El Mallorca B, por su parte, buscó una reacción y introdujo tres cambios para iniciar la segunda parte.
La primera gran ocasión de la segunda parte fue para el filial, pero entre el portero formenterer e Iván Alonso consiguieron salvar una prometedora acción que acabó en saque de esquina cuando Garay esperaba el balón en boca de gol.
Las cosas se complicaron mucho para el Formentera cuando en el 65, el árbitro vio un empujón de Celihueta sobre un atacante mallorquín y no dudó en señalar el penalti. Además, el centrocampista vio la segunda tarjeta amarilla, dejando a su equipo con 10. Gálvez no desaprovechó la oportunidad y puso las tablas. Empezaba un partido nuevo y Míchel Alonso tenía un hombre menos.
El segundo de los locales llegó en el 74 tras un grave error de Mendi. Tras un pase del ibicenco Montalbán, el central le dio al aire en su despeje y Gálvez no se desaprovechó la oportunidad de hacer el segundo de su cuenta particular y darle la vuelta al marcador.
En la recta final, en inferioridad, el Formentera lo intentó, pero lo cierto es que apenas tuvo capacidad de reacción. No pudo y el marcador ya no se movió. Los rojinegros, este domingo de amarillo, cayeron víctimas de sus propios errores.