El Class Bàsquet Sant Antoni certificó este sábado la tercera victoria de la temporada al deshacerse, en un partido muy trabajado, del Homs UE Mataró a domicilio por 81-90. Los isleños supieron sobreponerse a las bajas de último momento de Vinicius Da Silva y Aleix Haro, por una gastroenteritis, además de la de Kalinicenko, con molestias físicas. Sin embargo, el bloque entrenado por David Barrio supo sufrir y llegar más entero que su rival al tramo decisivo de un emocionante encuentro.
Un gran Dani de la Rúa (con 18 puntos, 6 asistencias y 30 de valoración), escoltado también por Fede Uclés (14 puntos) y Álex Llorca (13 puntos), fueron claves para tumbar a un rival que puso las cosas muy difíciles. En el bando visitante, Jordi Juanola (21 puntos) y Pape Bocar Sall (18 puntos) fueron los máximos artilleros.
El equipo ibicenco fue más compacto que en el pasado derbi balear frente al Palmer, estuvo más acertado en ataque y dominó casi en todo momento el electrónico. Mejoraron sus prestaciones para resarcirse del último tropiezo liguero y arrancar con fuerza un tramo de competición en el que jugará tres partidos en una semana.
En un primer cuarto muy igualado, el conjunto sanantoniense consiguió llevarse el gato al agua por 16-19. Ningún equipo fue capaz de dominar con claridad el choque, pero los isleños estuvieron muy serios. Estuvieron fuertes en defensa y muy correctos en ataque, para contener a un adversario impetuoso, que buscaba la primera victoria de la temporada.
Todo siguió muy parejo en el segundo cuarto, aunque los isleños arrancaron con un 0-4 de parcial que les disparó al 16-23. Sin embargo, los catalanes no daban su brazo a torcer y siguieron metidos en el encuentro. Tanto es así que recuperaron la iniciativa en el marcador con dos puntos de Pape Bocar (28-27). Los baleares pegaron un nuevo arreón con un triple de Iglesias y un 3+1 de Richards (28-34). Pero Cánovas, y sobre todo Juanola, mantuvieron a flote a los locales, aunque el Sant Antoni encendió la mecha desde el 6,75, con dos triples. Iglesias y Llamas percutieron el aro catalán para abrir una brecha de once puntos (33-44). Eso obligó al técnico del Mataró, Charly Giralt, a parar el partido. En la reanudación, siguió el intercambio de golpes y el Sant Antoni perdió su jugosa renta, para acabar el tercer cuarto sólo dos puntos arriba (63-65).
Se repitió el guión en el último acto, porque los sanantonienses se volvieron a escapar de once puntos (71-82), pero un bravo Mataró volvió a aferrarse a la pista para colocarse sólo a tres puntos (80-83) a falta de dos minutos para la conclusión del duelo. Podía pasar cualquier cosa. El choque entró en una fase de muchas impresiones, y con Jordi Grimau fuera de combate con cinco faltas personales cometidas, fue De la Rúa el que cogió las riendas del equipo ibicenco para poner rumbo a un nuevo triunfo, que lo selló Mollgaard con una canasta sobre la bocina (81-90). Este próximo miércoles, a las 12 horas, el Class recibirá en casa al Odilo Cartagena.