Importantes miembros del Barcelona se reunieron con Lionel Messi el miércoles para conversar sobre la insatisfacción del argentino con el técnico Luis Enrique, buscando evitar que la disputa socave el intento del club por alcanzar títulos esta temporada.
Luis Enrique está actualmente en el foco de atención y su futuro podría depender de si es capaz de limar las asperezas con la gran figura del Barcelona.
Xavi y otros jugadores influyentes del club catalán se reunieron con Messi antes del entrenamiento de este miércoles con el objetivo de calmar las aguas.
Esta crisis, sin embargo, no ha sido una gran sorpresa teniendo en cuenta el fuerte cáracter de Luis Enrique y la manera en que Messi, como jugador más influyente del club, recibe ciertos privilegios.
El ex entrenador del Barcelona Pep Guardiola se resignó a permitir que Messi jugara prácticamente todos los partidos después de enfrentarse a la ira del argentino cuando intentó que éste descansara.
Otros entrenadores del club también han preferido mantener la paz, principalmente durante la última temporada Gerardo «Tata» Martino, compatriota de Messi. El ahora técnico de la selección argentina incluso salió en defensa del delantero cuando su nivel era cuestionado.
En el Barça, Messi ha pasado de ser un inocente adolescente que simplemente era feliz jugando al fútbol hasta convertirse en un profesional calculador que sabe el valor que tiene en el club.
Se cree que el argentino, que ha sido cuatro veces el Jugador del Año del la FIFA, podría estar disgustado con el estilo de Luis Enrique y sus tácticas durante esta temporada.
El Barcelona está segundo en la liga española, un punto por detrás del Real Madrid, que tiene un partido menos. Aunque todavía está en una buena posición, el equipo azulgrana no ha conseguido funcionar y en muchas ocasiones ha dependido del talento individual para sumar puntos.
El conflicto de Messi con Luis Enrique empeoró después de que el pasado viernes supuestamente casi llegaran a las manos durante un entrenamiento. Posteriormente, el fin de semana, el jugador se molestó por haber sido excluido del once inicial en el duelo contra la Real Sociedad.
El argentino había vuelto el viernes de su descanso navideño en Argentina y el entrenador consideró que no estaba preparado para jugar un partido que el Barcelona terminó perdiendo 1-0. Tras el encuentro, se habría producido otra acalorada discusión entre técnico y jugador.
El lunes, Messi no se presentó a un entrenamiento a puertas abiertas y tampoco acudió a una tradicional visita que realiza el club a niños enfermos de un hospital. El mismo día, el argentino empezó a seguir al Chelsea en la red social Instagram, provocando una serie de rumores sobre un futuro incierto.