El escocés Andy Murray cortó una larga racha negativa frente al serbio Novak Djokovic el domingo, tras vencerlo por 6-4 4-6 y 6-3 en la final del Torneo de Montreal.
Murray, número tres del mundo, terminó con una seguidilla de ocho derrotas ante el primer clasificado del ranking de la ATP. No había vencido a Djokovic desde la final de Wimbledon en 2013.
Ambos tenistas terminaron exhaustos tras las tres horas de partido, que se disputó bajo una temperatura que alcanzó hasta los 40 grados.
«Todo el mundo quiere que nos molestemos con Novak y la gente siempre intenta complicar las cosas entre nosotros», dijo Murray. «Es imposible sentirse muy cercanos cuando jugamos este tipo de partidos, porque es un desafío muy mental y físicamente exigente y hay que tratar de tener una ventaja competitiva también».
«Pero no es fácil (...) él es el número uno del mundo y no ha perdido en la Serie Master este año. Ganarle es extremadamente duro», agregó.
Después de que ambos jugadores lograron en los albores del partido roturas de servicio para llevarse un set cada uno, Murray se adelantó en el parcial definitivo con un gran juego.
Murray quebró el servicio de Djokovic en el segundo juego para luego adelantarse 3-0 con su servicio y de ahí marchar hacia su tercer título en las canchas duras canadienses, el primero desde 2010.