La imagen más emotiva de la final de la Eurocopa 2016 se produjo fuera del campo de fútbol. Tras la victoria de Portugal, un aficionado galo lloraba desconsoladamente al ver como su selección había sido derrotada 1-0 en la prorroga.
En ese momento, un niño portugués se acercó al aficionado de Francia para consolarle. Como se puede ver en las imágenes, el pequeño le agarró la mano y le animó. El francés agradecido le levantó el pulgar y le dio un beso en la cabeza. Finalmente, ambos se fundieron en un fuerte abrazo.
Estás imágenes muestran la cara más positiva de este deportes y sus aficiones. De hecho, el vídeo ya se ha convertido en un fenómeno viral en la redes sociales y en menos de 24 horas ya cuentas con millones de reproducciones en Youtube.