El mallorquín Jorge Lorenzo ha publicado una carta abierta en la que se despide de Yamaha tras nueve temporadas.
«El domingo subiré por última vez a la M 1 y será una sensación realmente extraña», destaca Lorenzo.
El piloto palmesano, que tiene prohibido hablar de su experiencia con la Ducati de la próxima temporada hasta la finalización de su contrato con Yamaha, destaca en su misiva que lleva «casi un tercio» de su vida con la escudería japonesa.
«Hemos vivido juntos más de 150 carreras, consiguiendo 43 victorias y 3 títulos Mundiales, nos hemos caído decenas de veces y nos hemos vuelto a levantar consiguiendo juntos hazañas increíbles (incluso algunas llevando todavía algo de anestesia en la sangre...)», subraya.
«Estos nueve años en Yamaha formarán parte de mi vida para siempre. Irrepetibles. Inolvidables», añade.
«Quiero dar las gracias a Yamaha y en especial a Lin Jarvis por haberme dado la oportunidad de entrar directamente al equipo de fábrica cuando apenas tenía diecinueve años y ni tan siquiera había conseguido mi primer Mundial de 250 c.c., en 2006», agrega.
«También agradecer el cariño y el esfuerzo de mis mecánicos, los que han estado desde el primer día y los que han llegado más tarde, y a los ingenieros japoneses que siempre consiguieron darme una moto ganadora. Sin vosotros, no hubiera sido posible. ¡Gracias a todos!», indica Jorge Lorenzo en su carta.
«Me voy de Yamaha con la cabeza bien alta, con la conciencia tranquila de haberlo dado todo en cada entrenamiento y en cada carrera, sabiendo que todo lo que he vivido aquí me ha servido para ser mejor piloto y persona», señala.
«A partir del año que viene tengo nuevos retos, pero en Yamaha todavía nos queda el último objetivo: intentar ganar la última carrera de la temporada. Sería muy bonito despedirme haciendo este último regalo a los que han confiado en mí», resaltó el triple campeón del mundo de MotoGP (2010, 2012 y 2015).