El Govern balear ha aprobado este viernes una transferencia extraordinaria de 850.000 euros para el Consell de Mallorca para atender la demanda de renta mínima de inserción tras agotarse los 4,6 millones de euros que destinó a este programa de ayudas el pasado mes de julio.
«Si hay demanda, seguirá estando por encima de todo en las prioridades», ha asegurado el portavoz del ejecutivo, Marc Pons, en la rueda de prensa posterior al Consell de Govern.
Pons ha indicado que los fondos previstos en los presupuestos de este año para la renta mínima de inserción han resultado insuficientes y ha precisado que la nueva aportación beneficiará a unas 2.000 personas con pocos recursos.
«Hay necesidades que tenemos que abordar», ha manifestado el portavoz, que no descarta que antes de que concluya el año sea necesario otra transferencia extraordinaria en la misma línea.