Balears ha reciclado un total de 34.680 toneladas de envases domésticos en 2014, de forma que cada ciudadano depositó una media de 15,4 kilos de envases ligeros (envases de plástico, latas y briks) en el contenedor amarillo, mientras que los envases de cartón y papel depositados en el contenedor azul (31,1 kilos) superaron a la media nacional con 16,4 kilos más por habitante.
Así se desprende del 'Estudio de hábitos y actitudes de la población española frente a la separación de los residuos y la recogida selectiva', realizado por IPSOS para Ecoembes, que además apunta que la mayoría de los baleares que afirma reciclar lo hace para contaminar menos y proteger el medio ambiente (99%), así como para dejar un mejor legado a las generaciones futuras (94%).
El estudio ha elaborado además una radiografía de los ciudadanos a la hora de reciclar, estableciendo tres tipologías: 'Ecofriendly', 'Ciudadano difuminado' y 'Poco comprometido'.
En este sentido, el 81,9 por ciento de los baleares encuestados pertenece a la primera categoría, compuesta por ciudadanos comprometidos con el medio ambiente que respetan y protegen el planeta. Así, afirman que separan más de cinco tipos de residuos de envases identificados (latas, envases de plástico, briks, aluminio, papel, cartón y vidrio).
El estudio también analiza el perfil y retrata a un ciudadano con edad comprendida entre los 35 y 54 años, y con diferencias entre hombre y mujer muy leves.
En la categoría de 'Ciudadano difuminado' se ubica el 9,4 por ciento de los baleares. En ellos se destaca una menor implicación con el cuidado del planeta a través del reciclaje, pues sostienen que separan entre tres y cuatro de los siete tipos de residuos.
En el último puesto se encuentra el perfil 'Poco comprometido', formado por ciudadanos despreocupados con el cuidado del medio ambiente. Así, un 8,8 por ciento de los baleares encuestados no cree en los beneficios del reciclaje o tampoco los conoce, ya que afirman separar entre dos y ninguno de los siete tipos de residuos.
Así, el informe pone de relieve que estos perfiles permiten afirmar que, aunque todavía queda camino por recorrer en materia de concienciación y educación, el reciclaje es un hábito extendido en los hogares baleares, lo que demuestra su gran compromiso con la sostenibilidad.
Pese al camino por delante, los datos de Baleares se sitúan por delante de la media nacional. Así, estos buenos resultados son fruto de un modelo de colaboración público-privada que empieza con el ciudadano al depositar los envases en uno de los 10.172 contenedores amarillos y azules distribuidos por toda la geografía balear para acercar el reciclaje a la población.
«Estos datos demuestran que poco a poco, con esfuerzo, concienciación y altas dosis de colaboración, estamos avanzando hacia la sociedad del reciclado. Es un compromiso de todos los baleares hacer de nuestro entorno un gran lugar para vivir. Respetando el presente, nuestro futuro será aún más sostenible», ha asegurado el consejero delegado de Ecoembes, Oscar Martín.