La Comunitat Valenciana y Balears harán un «frente común» para reclamar un nuevo modelo de financiación que atienda a los principios de igualdad y equidad entre ciudadanos, además de defender una mejora de las inversiones estatales e infraestructuras estratégicas como el Corredor Mediterráneo.
Así lo han asegurado el president de la Generalitat, Ximo Puig, y la jefa del Govern de Balears, Francina Armengol, tras la reunión que ambos han mantenido en el Palau de la Generalitat para tratar aquellas cuestiones en las que pueden colaborar.
Puig ha asegurado que una de las cosas que ambas autonomías tienen en común es que «son las peor tratadas» por el sistema de financiación actual, por lo que harán un frente común para la elaboración de un nuevo modelo, que pretenden que sea lo más abierto posible y al que esperan sumar a otras comunidades.
Puig ha explicado que no pretenden que sea «la Comunitat y Balears contra el mundo», sino que lo que buscan es sumar a este frente «al máximo de gente posible», y ha dicho que quieren hablar con Murcia, Andalucía o Aragón, entre otros.
«No se trata de ganar a nadie», sino de elaborar un nuevo modelo por el que «transpiren los principios constitucionales» de equidad e igualdad. «No somos iguales», ha asegurado sobre la situación de los españoles en estos momentos y ha añadido que eso es lo que la Comunitat Valenciana y Balears tratan de «romper».
Armengol, por su parte, ha asegurado que las consellerias de Hacienda de ambas comunidades llevan tiempo trabajando para hacer este frente común ante el gobierno de España en cuestiones que, según ha denunciado, «ahogan y crean desigualdades» entre los ciudadanos.
Ha defendido que la prestación de servicios básicos como la sanidad, la educación o los servicios sociales debe ser «equitativa estés en el territorio en el que estés», algo que no ocurre con el actual sistema de financiación.
Otra de las cuestiones en las que han coincidido ha sido en defender la importancia del Corredor Mediterráneo, así como una mejora de las inversiones del Estado, que según Armengol, «son ridículas» en ambas autonomías y «no dan garantías» a los ciudadanos que representan.
Puig ha asegurado que «cuanto mejor le vaya a todo el arco mediterráneo, mejor le irá a España» y ha recordado que por este espacio geográfico pasa más del 50 % de las exportaciones nacionales, por lo que «es deseable que tenga la fortaleza a nivel de infraestructuras necesarias».
La presidenta balear, por su parte, ha destacado que la Comunitat Valenciana y Balears trabajarán juntas «para lograr más justicia social para los ciudadanos que representan», y espera «encontrar más facilidades» para negociar con el Gobierno a partir de las elecciones del 20 de diciembre.
La Comunitat Valenciana y Balears colaborarán también en sectores estratégicos, impulsando reuniones bilaterales, como el cultural o el turístico, donde contemplan alguna acción conjunta que no han concretado.
Preguntados sobre si no buscar la «desconexión» con España les da «un plus» a la hora de negociar con el Gobierno, Francina Armengol ha dicho sobre el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy que: «Debería emplear a presidentes como nosotros que tenemos capacidad e diálogo y de extender puentes de diálogo».
«Eso sería bueno para España, para Catalunya y para cualquier territorio», ha afirmado Armengol, quien cree que el «plus» que tienen ella y Puig es que son presidentes «de comunidades que entienden que desde el diálogo es de donde surge mejor política».
Si eso les va a dar ventaja a la hora lograr una mejor financiación, ha dicho que depende de quién gobierne en España, mientras que Puig ha insistido en que ellos son «los de la conexión».