El primer pleno ordinario del año este jueves en el Ajuntament de Palma ha traído consigo la aprobación del cambio de denominación de la ciudad; de la adoptada por el anterior ejecutivo del Partido Popular de "Palma de Mallorca" a la defendida como «histórica» por el actual equipo de gobierno de Cort de "Palma".
El siguiente paso será elevar a la Mesa del Parlament la propuesta de sustitución.
La votación no ha estado exenta de polémica, y desde el PP lamentan que el Ajuntament «sigue enquistado en el pasado y alega la tradición para justificar el cambio de nombre», algo que califican de curioso.
Por su parte, el representante de Ciudadanos, Josep Lluís Bauzá, ha afirmado que el equipo de gobierno parece no entender las «dificultades que el nombre de Palma tiene fuera de Baleares». «Apelan a las tradiciones para unas cosas, y luego no tienen problemas en cambiarlas a su antojo o incluso derribarlas».
Sobre esta cuestión, el edil de Cultura, Patrimoni, Memòria Històrica y Política Lingüística, Miquel Perelló (Més per Palma), ha recordado que la vinculación del nombre de "Palma" con la ciudad se remonta a sus mismos orígenes. «Los romanos fundaron la ciudad con el nombre de "Palma"», ha indicado.
Además, el regidor de Igualtat y Joventut Aligi Molina (Som Palma) ha criticado al popular Javier Bonet por «insultar a la gente de Ciutat» diciendo que el cambio de nombre o defender los derechos de los animales «son tonterías».