La diputada de MÉS per Mallorca, Margalida Capellà, ha señalado que la Ley Balear de Fosas, cuya toma en consideración será aprobada este martes en el Parlament con la abstención del Grupo Parlamentario Popular, «no quiere abrir las heridas, sino cerrar un capítulo de la historia».
Según ha explicado Capellà en los pasillos del Parlament, la futura Ley otorgará competencias al Govern para facilitar la localización y exhumación de fosas comunes en Baleares, una normativa que, según ha recordado, la asociación de familiares de desaparecidos «está esperando desde hace tiempo».
Con todo, ha explicado que será en el presupuesto del próximo año, de 2017, cuando habrá una partida específica para la exhumación, cuyo coste oscila entre los 100 y los 400 euros, si bien, en el caso de fosas comunes no está cuantificado.
Así, la diputada de MÉS ha aventurado que ya se podrá a empezar a exhumar fosas el año que viene.
Por su parte, la portavoz del Grupo Parlamentario Podemos, Laura Camargo, ha coincidido en señalar que la Ley Balear de Fosas «llega tarde» y ha criticado la abstención del PP, lo que en su opinión demuestra la «falta de coherencia y valentía».
Así, el GPP ha anunciado que se abstendrá también a la toma en consideración de la Ley LGTBI.
«Es un partido dividido, que no sabe si salir de la caverna o quedarse dentro de la caverna», ha dicho Camargo en referencia a la postura del PP.
Por su parte, la portavoz popular, Marga Prohens, ha explicado que su abstención a la Ley de fosas es por «responsabilidad», porque, según ha indicado, «sabemos que hay gente que quiere recuperar los restos de sus familiares, y ante ello nos solidarizamos».
No obstante, Prohens ha matizado que no están de acuerdo con parte del texto de la futura normativa, por lo que ha anunciado que presentarán enmiendas sobre cuyo contenido están trabajando en este momento.
Por último, ha replicado a MÉS que, si realmente no quieren abrir heridas, «tendrá que ser la ley de todos».