El conseller de Territorio, Energía y Movilidad, Marc Pons, ha denunciado este jueves que el Gobierno estatal ha puesto en marcha un nuevo sistema del mercado energético en el territorio español que «implica un claro agravio comparativo para los ciudadanos de Balears».
Pons y el director general de Energía y Cambio Climático, Joan Groizard, han explicado en rueda de prensa que se trata de «la ruptura del, hasta ahora, mercado energético único», en marcha desde septiembre de 2015, y que implica que la factura de electricidad en las Islas Baleares «se haya incrementado en un 15%».
Es decir, han señalado, ya se han pagado 42 millones más de factura de electricidad, unos seis millones mensuales.
Según han concretado, el origen de este cambio es el Real Decreto 738/2015, de 31 de julio, por el que «se regula la actividad de producción de energía eléctrica y el procedimiento de despacho en los sistemas eléctricos de los territorios no peninsulares».
Este real decreto, amplían desde el Ejecutivo autonómico, implica la creación de diferentes mercados no peninsulares y, de forma paralela, se ha creado un nuevo sistema para calcular el precio de la energía en los mercados no peninsulares que implica que el sobrecoste ya no se reparte automáticamente de forma solidaria entre todos los consumidores del Estado, sino que se traslada parte de este sobrecoste a los consumidores de las Islas.
Desde el Govern, han precisado que la «rotura del principio de unidad del sistema eléctrico» implica que «las comercializadoras deben adquirir la energía a un precio diferente, que hasta ahora ha resultado más caro en caso de las Islas».
Asimismo, el nuevo sistema de cálculo de precio, basado en hora/ demanda, hace que en un territorio como el de Baleares, con puntas de demanda muy fuertes (especialmente en la temporada de verano), el precio resultante sea muy más alto que en la mayoría del Estado.
Por todo esto, han asegurado desde el Ejecutivo balear, los clientes han dejado de estar en las mismas condiciones en todo el Estado.