Al Govern le sobraron el año pasado 54 millones de euros. Es la diferencia entre lo que ingresó y lo que finalmente gastó y, por primera vez en más de una década, la cifra es positiva. Esos 54 millones que ahorró parecen insignificantes si se comparan con los 4.876 millones que gastó el año pasado, pero la perspectiva cambia si se tiene en cuenta que, ocho años antes, en 2010, el Govern gastó 1.149 millones de euros que no tenía ni presupuestados ni apalabrados con los bancos.
En ocho años se ha pasado de gastar 1.149 millones que no se tenían a ahorrar 54 millones, lo que significa que por primera vez en más de una década el Ejecutivo balear ha cerrado el año con superávit y no con déficit. La consellera d'Hisenda, Catalina Cladera, presentó ayer los datos de cierre del año 2017, unas cifras que permitirán al Govern no aumentar más la deuda y amortizar 180 millones. Ello tendrá otra consecuencia positiva en las estadísticas de Balears y es que, por primera vez en años, el Govern cerrará el ejercicio económico debiendo menos dinero que el año anterior: de 8.802 millones de deuda en 2017 a 8.620 en 2018. «Hemos demostrado que se puede reducir el déficit y reforzar a la vez las políticas sociales», apuntó la consellera Cladera. La explicación a esta circunstancia está en la mejora general de la economía de Balears. Como hay más actividad económica, hay más consumo, se recauda más en IVA, las empresas pagan más impuestos y el Govern ingresa más dinero. La mejora de la actividad económica supuso unos ingresos añadidos de 347 millones con respecto al año anterior.
Más gasto
En la presentación de los datos del cierre del ejercicio, la consellera destacó el enorme esfuerzo realizado en políticas sociales y, de manera especial, en sanidad. Un ejemplo es el gasto del IB-Salut, que ha aumentado en 209 millones de euros en apenas dos años. El resultado es que, en 2017, el gasto sanitario en Balears alcanzó la cifra récord de 1.516 millones de euros.