Las patronales hoteleras y los sindicatos mayoritarios en el sector, CCOO y UGT, han alcanzado un acuerdo histórico para reclamar de forma conjunta al Gobierno que tome medidas precisas y concretas en defensa del sector y por el mantenimiento de los puestos de trabajo. El documento lo han firmado la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) y los representantes de ambos sindicatos y le han dado apoyo tanto la Agrupación de Cadenas Hoteleras (ACH) de Balears como la Federación Enmpresarial Hotelera de Mallorca (FEHM).
Sindicatos y patronal entienden que, una vez que se levante el estado de alarma, persistirán las restricciones a la movilidad y al transporte en todo el mundo, lo que hará que la actividad hotelera sea de las ultimas en recuperarse. Por ello solicitan que se amplíen seis meses las ayudas laborales, como los ERTE, con la exención de cuotas empresariales a la Seguridad Social y de protección específica por desempleo a los trabajadores.
Fijos discontinuos
En esta petición se hace una mención expresa para que estas medidas afecten también a los fijos discontinuos con prestaciones y ayudas públicas suficientes, sin exigencia de carencia, y la reposición de las prestaciones que pudieran consumirse durante la situación legal de desempleo.
El acuerdo incluye un punto en el que se pide que los afectados por ERTE perciban en la fecha estipulada en sus convenios colectivos el importe total de la paga extraordinaria de verano correspondiente.
Por su parte, para paliar los efectos del ERTE en la renta inmediata de los trabajadores de la hotelería, se acuerda que las empresas abonen, a quienes lo soliciten, el adelanto de la paga extraordinaria completa antes de su vencimiento.
Los empresarios se comprometen a llamar a los fijos discontinuos en la fecha en que estaba prevista su reincorporación al trabajo y posteriormente se las incluirá en el correspondiente ERTE, como al resto de la plantilla.
Otra medida que afecta a los empresarios pasa por solicitar al Gobierno un periodo de doce meses de carencia en las amortizaciones de capital en aquellas operaciones financieras que mantengan la actividad. Durante los próximos doce meses las empresas pagarían únicamente los intereses.
En caso de reapertura paulatina, las empresas se comprometen a no recurrir al trabajo temporal o a contratos de duración determinada hasta el reingreso de la totalidad de la plantilla afectada por el ERTE por fuerza mayor.
El acuerdo precisa que los representantes sindicales participarán en el proceso de incorporación progresiva de las personas trabajadoras. Asimismo, se ha acordado que se adopten previsiones para que puedan vincularse mejoras de la prestación por desempleo a cargo de las empresas, cuando estas alcancen niveles de ocupación o actividad adecuados, en los términos que se negocien en cada empresa.
Los hoteleros de las Islas enviaron ayer un comunicado en el que aseguran que este tipo de acuerdos debe ser el camino adecuado para proteger al sector y reclaman al Gobierno que se pronuncie ante unas reclamaciones para una actividad que supone el 14 por ciento del PIB nacional.