Los transportistas están convocados por la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías a secundar, a partir de este lunes, un paro indefinido ante la «gravísima» situación del sector y unas condiciones laborales «inadmisibles»,tal y como informa EFE.
La plataforma convocante, el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC), ha enviado una larga lista de reivindicaciones a los ministerios de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Trabajo y Economía Social como la prohibición de la contratación de los servicios de transporte de mercancía por carretera por debajo de los costes de explotación.
El CNTC justifica el paro en el hecho de que la administración «sigue negociando con los cargadores (que son los integrantes del Comité Nacional de Transporte) en vez de atender las llamadas de SOS de los auténticos protagonistas del sector», que son los camioneros de a pie. Afirman que esta organización está «formada, dirigida, acreditada y legitimada por el sector de base, que es el que realmente tiene y lleva los camiones (medianas y pequeñas empresas y conductores), que a su vez es el 90 % de los vehículos que desarrollan materialmente la actividad».
En cambio, las grandes patronales del sector, a pesar de advertir de la brutal escalada de los precios de la energía, agravada en las últimas semanas por la situación bélica que se vive a nivel internacional, tras la invasión rusa de Ucrania, no secundan el paro convocado por la plataforma. Y han alertado, al igual que el Gobierno, sobre los mensajes en redes sociales que anuncian posibles desabastecimientos por el efecto del paro y llaman a la calma porque defienden que no se van a producir.
Fuentes del Ministerio de Interior han asegurado que las fuerzas de seguridad pondrán el operativo necesario para garantizar la normalidad en las carreteras. La Confederación Española de Transportes de Mercancías (CETM), mayoritaria, con 65.000 empresas y 260.000 vehículos, el 80 % de la flota española, considera que no es momento de hacer paros y pide al Gobierno que refuerce las actuaciones de las fuerzas de seguridad para evitar problemas en las carreteras a partir de este lunes.
Por su parte, Fenadismer ha pedido respetar a los transportistas que decidan sumarse al paro y también a los que opten por continuar prestando su actividad. Según esta organización, la situación se ha hecho insostenible por el incremento imparable y diario del precio de los carburantes, que en la actualidad ya representa más del 50 % de los costes de explotación de la actividad. La Asociación del Transporte Internacional por Carretera (ASTIC) ha alertado de la debacle económica, debido al desabastecimiento de todo tipo de bienes, a la que los españoles nos podríamos enfrentar si el Gobierno no adopta de forma inmediata medidas excepcionales para ayudar a las empresas del sector ante la descontrolada escalada de precios de los combustibles.
El departamento de mercancías del CNTC, en el que están representadas las tres asociaciones, junto con algunas otras más, ha solicitado al Gobierno «una reunión urgente e inmediata», para impulsar las medidas excepcionales que la situación precisa, al tiempo que ha asegurado que «no ha convocado ningún paro de transporte, ni cree que en esta coyuntura sea una solución eficaz».
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha anunciado que se reunirá en los próximos días con el CNTC para valorar, en la coyuntura actual, la posible priorización de alguna de las medidas del real decreto-ley para mejorar la sostenibilidad del transporte de mercancías por carretera y el funcionamiento de la cadena logística, aprobado el pasado 1 de marzo. Una de las medidas incluidas en esa norma es el establecimiento de una revisión obligatoria del precio del transporte cuando varíe el coste del combustible desde el momento de la contratación hasta la realización efectiva del transporte.
También CCOO considera que los problemas del sector no se resuelven con huelgas «como la convocada por una plataforma de conductores autónomos», sino con negociación y con la apertura de una mesa de diálogo social. No obstante, el sindicato entiende que la convocatoria de paro demuestra que el real decreto de marzo, pactado entre Transportes y el CNTC, «no resuelve los problemas del sector».