«Hemos adoptado que decaigan todas las medidas extraordinarias que hubieran sido acordadas ligadas a esta crisis sanitaria». Son palabras de ministro de Sanidad, José Miñones, en el Consejo de Ministros de este martes en el que se anunciaba el esperado final del uso de la mascarilla en las farmacias y los centros de salud.
En Baleares, además, se podrá volver a fumar en las terrazas y en la vía pública a menos de dos metros del resto de transeúntes, una práctica que hasta ahora estaba prohibida. «Nosotros nos adherimos a un artículo de la Ley de Medidas Urgentes de Prevención, Contención y Coordinación para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19», ha explicado la directora general de Salut Pública en funciones, Maria Antònia Font. «Eliminar el tabaco de las terrazas era una medida de control que se tomó en base a la evidencia científica y la mantuvimos», ha añadido.
Si bien el ministro Miñones ha advertido que toda la normativa quedará derogada, sin matices, en cuanto se publique en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que será previsiblemente este miércoles o jueves; Font añadía que habrá que ver el texto final del documento oficial por si se deroga la ley al completo o por artículos y, en este caso, fijarse específicamente en el 3, que es el que regulaba las diferentes prohibiciones adicionales que implantaron las comunidades. En este improbable supuesto, si la norma se mantuviera, sólo un Consell del nuevo Govern podría derogarla, explica Maria Antònia Font.
Según la responsable de Salut Pública durante la pandemia, «la prohibición de fumar en las terrazas se está cumpliendo muy bien, cuando sales de aquí se nota», señaló. Font defiende la medida, como lo hace la Asociación Española Contra el Cáncer en Balears (AECC), puesto que el humo del tabaco, en distancias cortas, no sólo puede transmitir enfermedades, tiene otros muchos efectos adversos para la salud.
En este sentido, y en vista a que la normativa fuera a decaer de forma inminente, la AECC inició hace un mes una campaña junto con el sector de la restauración y las hostelería de las Islas para que los establecimientos se declaren libres de humo y la prohibición se mantenga en aras al beneficio de la salud pública.
Mascarillas
Desde su publicación este miércoles en el BOE dejará de ser obligatorio, también, el uso de las mascarillas en las farmacias o centros sanitarios y sociosanitarios. «Quedará como recomendable y cada uno podrá decidir internamente en qué espacios se mantiene», explicó Font, quien ha participado en los Consejos Interterritoriales junto con el resto de autonomías. Aún así, las autoridades sanitarias, recomiendan «mantener la cultura de la responsabilidad» y «no bajar la guardia».
Con el 93 % de la población llevando al menos una de las vacunas COVID y tras 1.207 días, finaliza la crisis sanitaria en España. «Desde noviembre de 2022 la situación es equilibrada e incluso muestra síntomas de decrecimiento», indicó el ministro Miñones que, por otra parte, anunció el uso de la vacuna Hipra en población vulnerable el próximo otoño.