Los precios de los alimentos han frenado momentáneamente su escalada: llenar la cesta de la compra en Balears es un 10 % más caro que hace justo un año según los datos de septiembre, los cuales, sin embargo, no presentaron ningún cambio con respecto al mes anterior.
Así lo refleja la estadística del Índice de Precios al Consumo (IPC) publicada en el día de ayer, la cual marca una subida general del 4 % en el interanual y -al igual que el apartado de la alimentación- una variación nula en la comparativa intermensual.
En el caso de los alimentos, esta situación no implica que estos no continúen subiendo si se toma una fotografía panorámica: el repunte de septiembre, del 10,4 %, es el menor registrado en todo 2023 si se compara con el mismo periodo del año anterior; de hecho los meses con las subidas más acusadas en este sentido fueron las de febrero y marzo, cercanas al 16%.No obstante, si analizamos la variación en lo que va de año, no se puede concluir que 2023 esté dando un verdadero respiro, ya que los precios han subido un 6 % desde el pasado enero.
Por grupos de alimentos, el aceite sigue en la cúspide de los más encarecidos (un 42,2 % más que hace un año y un 25 % más desde enero). En términos de subida interanual, el azúcar se sitúa un mes más en el segundo lugar de la lista con un alza del 37,6 %. Les siguen, ya a distancia, los grupos de agua mineral, refrescos y zumos (15%); patatas y productos lácteos (12%); y la carne de cerdo (11,8%). A nivel estatal, la subida del precio del aceite alcanza un 67 % de subida interanual y un 39 % desde enero. Una situación que va a continuar en los próximos meses e incluso puede que todo el año que viene, según auguran voces como la de la Asociación de Producción Agraria de Mallorca, quien apunta a factores de producción y también especulativos. Y ello a pesar de que en Mallorca sí se espera una temporada de «gran abundancia y calidad» para el sector.
El aceite sigue siendo el producto más encarecido.