Los farmacéuticos pasan más de seis horas a la semana buscando alternativas a los medicamentos de los que existe un déficit, ya sea en el laboratorio, como en otra farmacia o en almacenes, según explicó ayer el presidente del Col·legi de Farmacèutics de Balears (COFIB), Antoni Real.
La falta de fármacos es un problema que el COFIB ha trasladado a la presidenta del Govern, Marga Prohens, con quien se reunieron ayer. Y lo es no sólo en Balears, también a nivel estatal.
«Uno de los factores es el precio», reconoce Real, aunque también que «la gran industria se va a fabricar a China y a la India, donde están las máquinas. Esto repercute porque si hay problemas de contaminación lo ralentiza todo... Son muchas las causas, a veces es porque faltan accesorios como los blísters...».
Si bien Real hace un llamamiento a la calma porque en más del 90 % de los casos los fármacos tienen un substituto de su mismo grupo terapéutico, sí se ha convertido en un problema laboral para tratar de evitar una molestia al paciente.