Una veitena de organizaciones conservacionistas del Mediterráneo se darán cita en Mallorca desde este martes hasta el jueves para hablar de la protección marina, de la que han apuntado que Baleares podría liderar el objetivo de «proteger estrictamente» el 10 por ciento marcado para 2030.
Este grupo de entidades se denomina Med Sea Alliance y pretende recuperar el mar Mediterráneo como un «ecosistema rico y resistente», donde las normas y la práctica de pesca «ayuden a mejorar la salud del medio marino y beneficien a las comunidades que dependen de él», según ha explicado la Fundación Marilles en una nota de prensa.
La organización conservacionista ha apuntado que este encuentro es una «oportunidad única» para destacar a Baleares como ejemplo de conservación marina.
Tal y como ha explicado el presidente de la Med Sea Alliance y director de la Fundación Marilles, Aniol Esteban, esta reunión es un «paso adelante» para «consolidar el liderazgo de Baleares en la protección marina en el Mediterráneo», ya que pretenden «aumentar la protección de los mares y garantizar su salud para las generaciones futuras».
Para ello, ha aseverado que la colaboración internacional es «fundamental» para garantizar que los espacios marinos protegidos sean «realmente efectivos». «Esta reunión de la Med Sea Alliance es una oportunidad para sumar fuerzas, compartir soluciones y acelerar la protección de los mares», ha añadido.
La directora de la Med Sea Alliance, Karlijn Steinbusch, ha señalado que «tan sólo el 0,23% del mar Mediterráneo se encuentra bajo protección estricta», lo que limita la actividad humana para restaurar los ecosistemas marinos.
Desde la entidad, han defendido que para 2030 cada país mediterráneo debe garantizar que al menos el 10 por ciento del mar esté estrictamente protegida.
«Estas áreas vulnerables son esenciales como zonas de cría para la vida marina y cruciales para la resiliencia climática. Baleares puede liderar el camino al marcar el estándar para la conservación marina en toda la región», ha alegado Steinbusch.
Durante el encuentro, se debatirá sobre las estrategias para ampliar los espacios marinos protegidos, reducir los impactos de la pesca destructiva, combatir la pesca ilegal y desarrollar políticas que garanticen una gestión sostenible de los recursos marinos.
Entre los asistentes destaca el ganador del Goldman Environmental Prize 2023, Zafer Kizilkaya, que ha liderado con éxito el proyecto de recuperación de la bahía de Gökova, en Turquía, uno de los espacios marinos más protegidos y restaurados del Mediterráneo.
Su presencia en Mallorca es una ocasión para poner de relieve las oportunidades que ofrece una protección más estricta en términos de recuperación de ecosistemas, aumento de la biodiversidad y mejora de la sostenibilidad económica a largo plazo.
«La experiencia de Kizilkaya en Gökova es un claro ejemplo de los beneficios que pueden obtenerse cuando se trabaja con comunidades locales y gobiernos para proteger los ecosistemas marinos», han reivindicado.