A sus 47 años y tras haber desarrollado durante muchos años una afición casi privada por la escultura en hierro forjado, Juan Serra inaugura esta tarde en la galería Marta Torres una exposición, que permanecerá abierta al público hasta el 5 de septiembre, en la que presenta 34 obras de diferentes tamaños, resultado de tres años de trabajo en el estudio que tiene junto a la herrería de su propiedad, en Puig d'en Valls: «Al principio, la escultura la empecé como hobby, pero llevo tres años en los que cada vez dedico más tiempo al arte, me lo tomo más en serio; así que tengo que ir sacando las obras porque ya no tengo ni sitio en donde ponerlas», explicó.
No es la primera ocasión que Juan Serra presenta su obra en público; en 1986 expuso en «Sa Nostra» la pieza titulada «La descomposición del tiempo», dentro de una bienal de arte que organizó el Club Iberia, compañía para la que trabajó 19 años. En esta ocasión, la mitad de las 34 obras que exhibe son pequeñas: «Todas realizadas en hierro forjado al que le doy un final rústico al mezclar el electrodo con el hierro». Son figuras impresionistas sobre ideas con las que quiero dar a pensar al espectador. Entre ellas hay un homenaje a mi isla, con un molinos, dos payeses de tamaño natural y una prensa de hacer vino en miniatura», precisó el artista.