El músico puertorriqueño Tito Puente, considerado por la crítica como «El rey de la música latina», murió el miércoles en un hospital de Nueva York mientras era sometido a una operación del corazón. El prestigioso timbalero, quien estaba casado con la cubana Celia Cruz, «la Guarachera de Cuba», con quien compartió escenario durante muchos años, fue ingresado el martes al hospital para corregirle una condición mecánica que tenía en una válvula, cuando se produjo el deceso.
Puente fue nombrado recientemente Doctor en Música «honoris causa» por la prestigiosa Universidad de Columbia de Nueva York, en reconocimiento a su dilatada trayectoria musical. El «Rey de la Música Latina», nacido en Nueva York y de ascendencia puertorriqueña, recibió la distinción de manos del presidente de esta institución, George Rupp, Tito Puente puso al mundo a bailar a la vez que estableció vínculos entre naciones, generaciones y disciplinas musicales.
Este hijo del Harlem hispano que creció entre rumbas y boleros, se convirtió en el líder del mambo en los años cincuenta y grabó piezas de jazz con los artistas más destacados, entre ellos, el gran Dizzy Gillespie, Lionel Hampton y Woody Herman.
Puente fue distinguido con cuatro Premios Grammy y llevó sus conciertos por las principales capitales del mundo. También es importante resaltar el impulso que este genial artista ha dado a músicos y compositores de las nuevas generaciones a través del Fondo de becas que lleva su nombre y que desde su creación en 1980 ha otorgado más de 50 ayudas al trabajo musical y otros premios. Desde 1948, cuando tocaba en la famosa sala Palladium de Nueva York, Puente marcó toda una época con su manera de interpretar la música a través de la percusión.