Una clara y melancólica nostalgia preside las páginas de «La isla perdida, memoria de una época», de Fernando-Guillermo de Castro, que acaba de ser publicado en la Editorial Mediterrània. La obra, que será presentada próximamente en la isla, es una crónica personal de los ambientes ilustrados y cosmopolitas de la isla desde finales de la década de los 50 a principio de los 60, realizada por este escritor y periodista madrileño, quien conoció Eivissa por primera vez en 1956 y tuvo relación directa con las principales figuras de la cultura ibicenca, así como con artistas y personajes variopintos de los muchos que entonces residían de forma permanente o parcial en la isla.
Escrito con una cuidada prosa, gustadora de cierta retórica añeja, por el libro van desfilando personajes ilustres de la cultura española, como los escritores Ignacio y Josefina Aldecoa, el guionista Rafael Azcona o el pintor Pancho Cosío. Asimismo, el volumen recoge la relación que el escritor madrileño tuvo con el mundo cultural y social de la isla. Así, desde la autoridad de Isidor Macabich (que le causó gran impresión personal e intelectual), el talento natural del pintor Antonio Ribas, Portmany o la personalidad proustiana del pintor Mariano Tur de Montis, junto a destacadas figuras de la burguesía local de la época desfilan por las páginas de sus páginas. Sin olvidar a los artistas del Grupo Ibiza 59, especialmente al ceramista soriano Antonio Ruiz (habitante entonces de la Casa de la Portella de Dalt Vila), quien fue su mejor cicerone para acceder al conocimiento del mundo cultural de la isla.
Fernando-Guillermo de Castro nació en Madrid. Estudió leyes y fue cronista de tribunales en «Informaciones». Hizo crítica literaria y artística. Publicó artículos, reportajes y cuentos en la prensa diaria y revistas. En el Tercer Programa de Radio Nacional de España mantuvo durante bastante tiempo una colaboración fija semanal que él mismo leía al micrófono. Obtuvo los premios de novela corta «Café Gijón» y «Sésamo», y algunos cuentos suyos fueron recogidos en varias antologías. Su libro sobre Eivissa incluye un apéndice con reportajes sobre figuras que conoció en la isla, como el poeta Jorge Guillén.