La consellera de Cultura, Fanny Tur, presentó ayer oficialmente el «ancla de Formentera», una vez concluidos los trabajos de restauración, asegurando «que no se moverá de la isla». El coste de la restauración ha sido de 1.050.000 pesetas y ha corrido a cargo de María José Escandell, que inició la misma en octubre de 1999.
El interés del ancla reside en su antigüedad y en sus dimensiones, de 5'60 metros de longitud, 2'40 de amplitud de la pala, más una argolla que la sujeta de 80 cms. de diámetro. El peso del conjunto supera las dos toneladas. Fanny Tur señaló que «se ha efectuado un tratamiento especial para poderla tener en la intemperie; más fuerte y resistente que si se hubiera previsto su exposición en un interior». La consellera no olvidó el agradecimiento institucional a Gerónimo Martín por «la cesión del ancla que sacó del fondo del mar en septiembre de 1997».
Fanny Tur quiso dejar claro que cualquier pieza de valor que se encuentra «pertenece al museo más cercano, que en este caso seria el de Eivissa, porque el Etnográfico de Formentera, aunque este gestionado por tres instituciones, no es técnicamente un museo público». No obstante, la consellera de Cultura afirmó que se están realizando los trámites pertinente para solicitar al museo de Eivissa que numere la pieza para el futuro Museo de Formentera, y por lo tanto ya puede quedarse en la isla, que es donde tiene que estar, legal y oficialmente».