Flores y tarjetas siguen llegando hasta los estudios de Abbey Road en Londres, mientras la bandera británica se mantiene a media asta en los principales edificios de Liverpool como tributo al fallecido Beatle George Harrison. «Eres talento, dignidad, fuerza y amor» o «siempre nos inspirarás» son algunas de las frases escritas en pequeñas notas de papel y colocadas junto con flores ante las verjas de los famosos estudios discográficos de Abbey Road.
En Liverpool, la ciudad que vio nacer al grupo musical británico, admiradores de los Beatles también se daban cita ayer ante los lugares más conocidos de la banda, como el museo dedicado a los músicos o «Penny Lane», la calle que inspiró una de las famosas canciones del grupo. Los principales edificios tenían la bandera británica a media asta como tributo a uno de los «cuatro fabulosos» que hicieron que Liverpool fuera conocida en todo el mundo. En esta ciudad se podían ver también flores, velas y tarjetas ante los monumentos con las imágenes de los Beatles.
Durante toda la jornada de ayer, la televisión y las emisoras de radio de todo el país no dejaron de recordar al fallecido guitarrista, y ponían algunas de las canciones más conocidas del legendario grupo musical, como «Let it be» o «Here comes the sun». Harrison, que tenía 58 años, falleció el jueves pasado en Los Angeles, en el domicilio de un amigo y acompañado por su esposa, Olivia; su hijo Dhani, de 24 años, y los amigos más cercanos. Pese a que su muerte no fue una sorpresa, dado que estaba muy enfermo de cáncer, todo el Reino Unido se sumó al dolor por la pérdida de otro integrante de los «Beatles».
Harrison había achacado sus problemas de salud a que había sido un fumador empedernido en su juventud. Con la muerte de Harrison, el jueves, y la de John Lennon, en 1980, del grupo musical quedan Paul McCartney y Ringo Starr. Según la prensa británica, el cuerpo del guitarrista habría sido incinerado y sus cenizas pueden ser llevadas hasta la India para ser esparcidas, dado que era un gran admirador de ese país.