La consellera de Cultura en funciones, Fanny Tur, entregó ayer los premios a los ganadores de la tercera edición del premio de poesía Illa de Formentera-Marià Villangómez, que recibieron ex-aequo Víctor Durbà y Joan Pomar por las obras «Un amant i un poeta. Una poeta i una amant», y «Llacorar el sentits», respectivamente. Ambos autores se repartieron los tres mil euros de dotación, más una escultura conmemorativa original del ceramista Toniet. El premio de Joan Pomar lo recogió en su nombre su hijo, que se llama como él.
En la tercera edición del premio de poesía Illa de Formentera se presentaron 26 obras. El jurado, presidido por Jean Serra, estaba formado por Francesc Escandell Castelló, Montserrat Mayans Tur, Bartomeu Ribes y Ramona Cols. Las obras serán publicadas próximamente por el Consell Insular.
Joan Pomar Mir (Campos, Mallorca, 1955), es administrativo y escribe poesía desde los 17 años. Tiene publicados cuatro libros y ha ganado algún premio de ámbito local o isleño. De su obra premiada ahora explicó a este periódico al enterarse del fallo el pasado febrero que «cuando uno tiene los sentidos a flor de piel, las emociones son más intensas». Tal intensidad es la que guía todos los poemas de «Llacorar els sentits», ampliando y mezclando los sentidos a más de los cinco clásicos. Por su parte, el valenciano Víctor Durbà tiene 28 años y lleva uno en Formentera. Escribe poesía desde hace tiempo, pero no tiene ningún libro publicado. Sobre su obra premiada, escrita en verso libre, afirmó que «son como elegías de amor y desamor que siguen un mismo hilo narrativo que pasa por todos los estados del sentimiento».