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´Urgensias´, una comedia disparatada sobre enfermos y sus circunstancias

Diabéticas Aceleradas presentan en Can Ventosa la novena producción de su trayectoria escénicas

Imagen de la presentación de la obra que tuvo lugar en diciembre en Palma.

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El centro cultural de Can Ventosa acogerá del viernes 8 al domingo 10 (días 8 y 9 a las 21'30 horas; día 10, a las 19'30 horas) las representaciones de «Urgensias», de Diabéticas Aceleradas, la nueva producción del grupo mallorquín, escrita en colaboración con Tomeu Cañellas. El humor ácido y crítico de esta singular compañía iconoclasta se centra en esta ocasión en uno de los temas más típicos y universales del teatro de todos los tiempos: enfermedades y enfermos y médicos y enfermeras y familiares de enfermos y enfermos mismos.

Pero antes que al «Enfermo imaginario» de Moliere y otros clásicos del género, el nuevo espectáculo teatral de Diabéticas Aceleradas se acerca más a la filosofía del Jerry Lewis de «El profesor chiflado» o a la Barbra Streissand de «¿Qué me pasa doctor?. Sólo hay que fijarse en los nombres de los protagonistas de «Urgensia»: la doctora Ester Colero, la enfermera Queti Paso, la auxiliar Paqui Derma y el doctor Puiggros, el singular equipo médico del centro de salut de Son Cas Capiscoll Vell, que atienden según su buen saber y entender (poco ortodoxo) a un conjunto de enfermos propios del mundo más delirante del disparatado grupo mallorquín; enfermos llevados a la caricatura, pero al mismo tiempo representativos del espectro cotidiano de los «clientes» que frecuentan los centros de salud, públicos y privados, de nuestra particular geografía y tiempo.

Joan Bauçà, Pep Noguera y Pepa Charro, con la incorporación de Santa Celaya y de Jaume Sastre, dan vida al conjunto de 19 personajes que circulan por esta comedia con la que Diabéticas Aceleradas vuelven al escenario ibicenco en el que han cosechado ya varios éxitos en sus anteriores visitas a Eivissa. Estrenada el 18 de diciembre del pasado año en la Sala Mozart del Auditorium de Palma, «Urgensias» ha sido vista por más de 35.000 espectadores.

Con «Urgensias», Diabéticas Aceleradas recuperan a las Matanceres Pereta Pixa y Maciana Pixa, que tanto éxito le han proporcionado en su trayectoria teatral. Además, por actores, la comedia reúne todo un muestrario de estereotipos para «hincar el diente» con un humor que tira hacia la sal gorda. Joan Bauçà : la recepcionista, Queti Paso, guapa y sexy, mayor, cleptómana, lleva dentadura postiza y peluca; es calva; Pep Noguera: la doctora Ester Colero, psicóloga, mal encarada, no escucha y suministra remedios más bien radicales; Santi Celaya: el doctor Puiggros, guapo, seductor, descarado y catalán; Pepa Charro: Paqui Derma, una auxiliar para todo, forastera nacida en Mallorca, habla mallorquín y andaluz; comedora compulsiva de toda clase de dulces, se ha presentado camuflada al casting de Operación Triunfo; es más bien rubia; y Jaume Sastre: Im Halum, picapedrero marroquí que hace tres años que hace obras en el centro de salud de marras; ocupa la mayor parte de su tiempo en rezar y escaparse a la cafetería.

Aparecerán, como siempre, políticos de Balears y, también, nuevos nombres como el de Letizia Ortiz, la esposa del Príncipe de Asturias. «La realidad y las Diabéticas siempre van juntas», apuntó Bauçà en la presentación de la obra en Palma. «Para participar en nuestras montajes hay que olvidarse de la vergüenza y del sentido del ridículo», añadió el veterano actor.

Algo que tuvieron que dejar de lado Jaume Sastre y Santi Celaya. «Trabajar con Diabéticas ha significado un reto porque, hasta el momento, nunca había participado en una obra como `esta», afirmó Celaya. Para el actor, el cambio supone «tirarse a la piscina» y «confiar en los compañeros». «Siempre provocamos, ése es nuestro sello», aseguró Pep Noguera, otro de los integrantes del grupo mallorquín.

Como viene siendo habitual en las presentaciones de Diabéticas Aceleradas, el estreno en Palma resultó realmente llamativo. Después de una merendola en un bar típico, recorrieron las calles del casco antiguo haciendo bromas a la gente, o, como dicen ellos, «montando jaleo». Saludaba a todo el que les miraba, repartieron preservativos a los jóvenes y no tan jóvenes provocando la risa a diestro y siniestro. Un espectáculo parecido al que montaron en su última visita a Eivissa, utilizando como escenario la cafetería Montesol y el paseo Vara de Rey.

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