La denuncia realizada el fin de semana por el Pacte Progressista del Consell sobre «el peligro que corren multitud de yacimientos arqueológicos y otros bienes del patrimonio rural», fue negada ayer por el conseller de Patrimoni, Joan Marí Tur. «Desmiento rotundamente una vez más las afirmaciones sobre la desaparición de tres yacimientos arqueológicos por culpa de la carretera de Sant Josep. Al contrario, Patrimoni actúo desde el principio para que se tomaran las medidas que se considerarán más adecuadas», afirmó ayer Mari Tur tras el consell executiu.
Según el conseller, «uno de los tramos fue intervenido arqueológicamente, pero con escaso resultado. Un segundo fue protegido y compatibilizado con la nueva carretera mediante la construcción de un muro de piedra seca que le hace de contrafuerte, y podrá ser excavado cuando se considere conveniente; y el tercero, sencillamente no se vio afectado». Visiblemente enfadado, Marí Tur precisó: «Es una mentira tendenciosa afirmar que se actúa bajo el espíritu de que el patrimonio no suponga una dificultad para los proyectos de nuevas y necesarias infraestructuras públicas o en mejorar las existentes».
Respecto a la pregunta del Pacte sobre si la Conselleria de Patrimoni piensa actuar en el yacimiento islámico de sa Punta, en Santa Eulària, Marí Tur afirmó que se encuentra «en una situación de estabilidad; la misma en la que estaba en los cuatro años del Pacte, que entonces lo ignoraba totalmente». De todas formas, el conseller aseguró que en este «y otros monumentos, como el de s'Argamasa», se están limpiando. «Otra cosa es la vivienda y el yacimiento que hay al final del acueducto. La situación no es fácil, porque habría que hacer un enorme dique de cemento dentro del agua; lo que no sé si estaría muy de acuerdo con la conservación del medio ambiente», precisó.