ENVIADA ESPECIAL A FRANCFORT
La poesía de Joan Miró a través de sus constelaciones de azules perduran a los 24 años de su muerte. Así lo testimonian as imnumerables exposiciones y estudios que aún se realizan en todo el mundo. Ahora, la obra de Miró vuelve a ser protagonista en Mallorca, una isla que el artista catalán amó con entrega y desde donde, aseguraba, conformó el triángulo de su arte, juntametne con Montroig y Barcelona.
En el marco de la Feria Internacional del Libro de Francfort se presentó el jueves la reedición del ensayo Miró i Mallorca, del editor Pere A. Serra, que 23 años después de su primera publicación vuelve a ver la luz con una edición renovada y en alemán. Ensiola ha sido la encargada de la publicación de la nueva edición de una obra en la que Serra hace un repaso de la relación de Miró con Mallorca y el legado que el artista dejó en la isla.
La galería Eva Winkeler, que ayer inauguró la exposición Serie Mallorca, fue el escenario de la presentación. El director del Institut d'Estudis Baleàrics (IEB), Sebastià Serra, ejerció de maestro de ceremonias y recordó cómo Pere Serra comenzó a gestar la idea del libro en 1982, juntamente con el propio Miró. Por su parte, el director literario de Ensiola, Guillem Frontera, recordó como el pintor vivió en la isla una «penumbra fructífera», y como Serra, gracias a la gran amistad que les unía, le animó a salir «de esa soledad y hacer cosas para Palma».
La universalidad del pintor catalán que «abrió caminos a nuevas ideas» fue uno de los rasgos que destacó Pere A. Serra durante la presentación de la reedición de su trabajo; acto en el que también recordó algunas anécdotas sobre sus vivencias con el prestigioso artista. El autor se mostró también muy satisfecho por la reedición de esta obra, que conserva la portada original que Miró realizo ex professo.
El acto de la galería Eva Winkerler de Francfort, que contó asimismo con la asistencia del presidente del Institut Ramon Llull, Josep Lluís Carod Rovira, se cerró con un brindis entre el autor, los responsables de la editorial Ensiola y los numerosos escritores y editores isleños presentes en Francfort que no quisieron perderse la cita con el arte universal del genio catalán de la pintura.