El Museu Arqueològic d'Eivissa cierra a partir de hoy y por unos dos meses sus puertas, debido a las obras de restauración que se están realizando en el baluarte de Santa Tecla, anexo al museo más veterano de la isla, ubicado en la plaza de la Catedral. Según apuntó ayer a este periódico su director, Jordi Fernández, la razón es porque las obras y las circunstancias climatológicas que pudieran surgir podrían causar algún daño al valioso contenido. Además, gracias a estas obras, que se costearán en su mayor parte con el '1% cultural' del Ministerio de Fomento, se subsanará los problemas crónicos de humedad que sufre el Museu Arqueològic.
El proyecto de consolidación y reparación de los parapetos de los baluartes de Santa Tecla y de Sant Bernat, con un presupuesto de 443.520 euros, es el tercero que realiza el Ayuntamiento de Eivissa gracias al '1% cultural'. Con su ejecución quedarán prácticamente finalizadas las actuaciones de mejora de la coronación de la muralla, a expensas de poder actuar en el baluarte de Sant Jordi, donde se harán las obras una vez finalizada la restauración del Castillo y su conversión en Parador.
Los parapetos de los dos baluartes apuntados tiene un interés especial, ya que conservan el trazo curvo que se proyectó en la fase de construcción de Calvi. En el de Santa Tecla se podrán documentar tres fases históricas de la muralla y se aprovechará para profundizar en los conocimientos sobre el monumento. Intervención que servirá para recuperar las salidas de agua originales del terraplén y evitar así las humedades en las casamatas del baluarte y los daños en los paramentos.