La obra «Coca-Cola 4» de Andy Warhol, padre del Pop Art, se subastó ayer por 31,5 millones de dólares (25 millones de euros) y se convirtió en una de las protagonistas de la puja de arte contemporáneo organizada por la firma Sotheby's en Nueva York.
La pieza de Andy Warhol (1928-1987), que partía con un valor estimado entre 20 y 25 millones de dólares, forma parte de un grupo de cuatro lienzos en los que el pintor reprodujo botellas de esa bebida, con lo que transformó ese producto cotidiano en un sorprendente referente del arte contemporáneo y de posguerra.
Junto a Warhol, el pintor estadounidense de origen letón Mark Rothko logró hacerse con otro de los precios más elevados de la velada al venderse su espectacular lienzo «Sin título» (1955) por 20 millones, justo en el estimado más bajo en el que lo había valorado Sotheby's.
La pintura realizada en tonos amarillentos y anaranjados, fue creada en uno de los años más importantes de la carrera de Rothko, 1955, cuando realizó 22 obras, la mitad de las cuales se encuentran repartidas en prestigiosos museos, como el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York, la National Gallery de Washington y el Museo Ludwig (Alemania).
Otro de los representantes del Pop Art, Roy Lichtenstein (1923-1997), centró también las miradas de los compradores con su obra «Ice Cream Soda» (1962), que fue adjudicada por 12,5 millones de dólares, a pesar de estar valorada entre 12 y 18 millones.
La obra, que muestra un copa con una bebida gaseosa y un helado, fue una de las piezas centrales de una de las primeras muestras dedicadas al Pop Art que tuvo lugar en 1963 en el Museo Guggenheim de Nueva York.
Junto a esa obra, Sotheby's ofreció también de Lichtenstein «Still life with a lobster», vendida por un total de 5,2 millones de dólares, y «Male head», que encontró un comprador que pagó 1,6 millones de dólares.